Hace unos días hablamos de qué eran los agujero negros y hoy traemos uno de los más singulares, uno supermasivo. Esta "bestia" cósmica tiene un tamaño 12.000 veces mayor que el Sol y se originó 1.000 millones de años después del Big Bang, por lo que es relativamente joven. Estos dos datos hacen que el agujero negro sea todavía más singular, ya que normalmente los agujeros supermasivos no se forman tan rápido.
El descubrimiento de este fenómeno astronómico hace que las teorías de formación de agujeros negros queden en duda. ¿Cómo es posible que agujeros negros tan grandes se formasen tan pronto con lo joven que era el Universo? Este agujero negro supondrá un laboratorio de investigación para todas las nuevas cuestiones que van a surgir.
Otras características de este increible agujero es la desproporcionada cantidad de radiación que emite equivalente a 420 trillones de estrellas similares al Sol. A pesar de que ninguna partícula puede escapar de los agujeros negros, estos emiten radiación, causa que nadie ha sido capaz de descifrar. El único que ha estado cerca de resolverlo ha sido Stephen Hawking, pero puede ser que con este nuevo hallazgo la cosa cambie.