Cada día la tecnología hace más por la salud. Ya es un hecho que los niños nacidos a partir del 2000 vivirán, la inmensa mayoría, más de 100 años. Ya nos avisan en nuestros teléfonos acerca de las vacunas de nuestras mascotas. Pues el último grito de la tecnología para nuestros perros y gatos son los ¡collares inteligentes!
Hace poco hablábamos de la influencia positiva de la tecnología en nuestras mascotas y dábamos el ejemplo de vacunas para cachorros enfermos de parvovirus con resultados sorprendentes.
¿Por qué esto va a incrementar la salud y vida de nuestras mascotas?
Sabemos muy bien la importancia de la detección temprana de enfermedades. Mejor que eso es la prevención pero muchas veces las enfermedades surgen, pues está comprobado científicamente en muchas enfermedades que su detección temprana incrementa las probabilidades de vida, ejemplo innegable de ello son distintos tipos de cáncer. Pues exactamente lo mismo sucede con nuestras mascotas.
Estos collares inalámbricos monitorean distintas constantes fisiológicas (pulso, respiración frecuencia cardiaca, temperatura…) que nos hablan del estado general de la mascota, pero no sólo eso, cada vez estos collares y métodos diagnóstico – preventivos medirán más cosas, más factores, un ejemplo podría ser el nivel de azúcar en sangre tanto para pacientes sanos como diabéticos.
Cómo funcionará, cuál será el precio…
Cada vez aparecerán más modelos y más marcas. Ahora mismo la compañía que los desarrolla se llama Pet pace, pero tiempo al tiempo y veremos cosas increíbles. Por ahora el precio es de 150 dólares más un alquiler mensual de unos 15 dólares. Tienen más información en petpace.com.
Este collar monitorea las constantes de nuestro perro o gato que pueden ser vistas a través de una app que se instala en el teléfono. Los veterinarios las analizarán de forma profesional, y por dicho servicio cobrarán alguna cuota mensual, anual, algo así es lo lógico.
Disponible en todo el mundo. Sí, el problema es que no todas las clínicas veterinarias están por la labor. No es tanto un problema de tecnología o de software, es una cuestión de logística, las clínicas tienen que invertir tiempo, pero las más punteras lo comenzarán a integrar como una parte más de sus servicios y de ahí empezará a expandirse el servicio.
Hay que tener en cuenta que además del gasto inicial de 150 dólares más el alquiler hay que pensar en el precio que las clínicas cobrarán por este servicio.
Conclusión, aún es caro, pero quizá sea cuestión de tiempo para que bajen los precios, y si dicho collar empieza a demostrar su valía, pues su uso se extenderá cada vez más, empezando por los pet lovers.
Aquí un vídeo corto de cómo funciona el Pet Pace Collar.
Saludos
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