Un objetivo no solo se establece, se estudia

Objetivo <->Estrategia

Así como todo objetivo necesita de una estrategia, de igual forma toda estrategia necesita de un objetivo, no obstante primero aparece el objetivo y luego la estrategia; en nuestras vidas cotidianas puede que terminemos haciendo muchas actividades con ningún propósito nítido, perdemos de vista el objetivo y eso ocurre, usualmente.

Ya se ha planteado, previamente, que una estrategia de negocios surge de la misión, aunque esta, a su vez, debe ser descompuesta en objetivos de sentido y dirección para que la misión que es esencialmente un objetivo de causa, razón, un ánodo de nuestra persona, encuentre un rumbo para su instauración, aunque sea parcial. De hecho, son, elementalmente, los objetivos de sentido los que se pueden amayorazgar a una estrategia, que por ser un conjunto de actividades requiere de la referencia entre el origen y el final.

Los objetivos de sentido

Ahora bien, cuando establecemos un objetivo de sentido, necesariamente estamos asumiendo un trayecto para alcanzarlo u obtenerlo, empero, nunca sabremos bien a bien cuál es, sobre todo si es nuevo, y para ello llevamos a cabo un trabajo de planeación estratégica que incluye la investigación y que la mayor parte de las veces no nos arrojará información, completamente, ajustada a la naturaleza de nuestro objetivo y cuya singularidad quedará siempre manifiesta por las propias condiciones, circunstancias y situación en la que nos encontramos., por lo tanto es menester emprender prototipos y modelos de prueba para conocer más la naturaleza de nuestro objetivo.

Por otro lado, en lugar de partir de lo general, es decir, desde el enunciado de la misión, podemos partir desde donde ya estamos, desde lo particular e ir estableciendo objetivos en base a la trayectoria de progreso a la que tienden para no complicarnos con costosos proyectos de investigación que al final resulten en objetivos inalcanzables para nuestra posición actual. El método inductivo de establecimiento de objetivos puede ser muy eficaz para pymes, así si una empresa ya a logrado 500 impresiones de anuncio con X cantidad de dinero, puede lograr más con menos.

No está demás rebobinar la afirmación que asienta el hecho de que todo objetivo de sentido necesita ser lo suficientemente concreto y definido para que podamos verificar cuando lo hayamos logrado o no, entre ellos está, por su puesto el de un volumen de ventas. o el de un número de likes, seguidores, interacciones, llamadas, etc..

No obstante, por encima de todo, cuando somos jóvenes o recién estamos emprendiendo un negocio, ni si quiera estamos seguros de qué objetivo establecer, tomando en cuenta, que llegar a una cifra de ventas implica estar en una posición que tampoco estamos, que no la conocemos y que se convierte en si misma un objetivo de sentido.

Por lo anterior, tenemos que tener cuidado de no cargarnos de mucha actividad que no tenga un sentido claro, aunque sea el de conocer y estudiar