La tradición del fuego, las hogueras, y los fuegos artificiales sirven para simbolizar el sol y ayudarle a renovar su energía. El fuego (junto a sus rituales) también tiene la simbología de destruir lo malo y lo dañino.
Con la verbena de San Juan llega la noche más corta y mágica del año. Ya he hablado de ello en varias veces, y supongo que la mayoría de vosotros ya sabréis que en muchas partes del mundo, se celebrarán fiestas y rituales diversos, entre los que cabe destacar las hogueras, fuegos artificiales y barbacoas a la luz de la luna, y sobre todo con mucha, mucha gente disfrutando de la fiesta del solsticio del verano.
En algunos lugares es tradición andar sobre brasas, en otros sitios se baila alrededor de grandes hogueras, en otros es tradición bañarse en la playa de madrugada para purificarse.
En otros es tradición quemar las cosas viejas y escribir una nota con todas las cosas negativas de las que queremos desprendernos para echarlas a la hoguera..
Hablando de esto, voy a proponeros un ritual de San Juan (hay muchos) que ayer llegó a mis manos, y aprovechando que es Luna llena, me comentan que es más efectivo. (Ojalá sea así).
No es muy complicado de hacer y bueno, por quien quiera probarlo ahí van los detalles.
Para este ritual de San Juan se necesita:
1 vela negra
tinta de oriberium (en su defecto tinta negra vale)
1 pergamino (o papel blanco)
1 pluma
1 vela de San Juan (1 vela amarilla)
3 chavos de Sta. Elena (o tres monedas pequeñas)
Esencia de verbena (ahí si que tenéis que buscarla)
Carbón
Incienso
Se coge el pergamino o el papel blanco y la noche de la verbena (hoy) se escribe en él con la pluma y la tinta, todo lo que deseemos desprendernos. Una vez escrito, lo doblaremos y lo colocaremos dentro del sobre, sellando sus aberturas con la cera de la vela negra.
Esto lo realizaremos en casa y a continuación lo tiraremos a alguna hoguera que tengamos cerca (esa noche no va a ser muy difícil) diciendo la siguiente invocación:
Yo (decid vuestro nombre y apellidos) invoco a las Salamandras del fuego para destruir todo lo negativo que he encerrado en el interior de este sobre. Qué así sea.
A continuación o después, cuando volvamos a casa, encenderemos la vela amarilla, la cual la habremos impregnado con la esencia de verbena y a ser posible (solo a ser posible) a las 2 de la madrugada, encenderemos el carbón y colocaremos el incienso sobre el mismo. Se puede colocar un trozo de coca y una copa de cava en el comedor o en el lugar donde se queme el incienso y la vela, ofreciéndolo a San Juan, tirando a la mañana siguiente la coca y el cava, pero dejando que la vela se consuma hasta su totalidad, en el caso de que no hubiera sucedido (apagadla antes de ir a dormir y volvedla a encender por la mañana cuando estéis en casa, para vigilar la llama, no vaya a ser que provoquéis un incendio en vuestro hogar…)
Con los chavos o monedas, uno debe ser regalado (a algún pobre que pida limosna), el otro se tendrá que tirar al mar dando siete pasos hacia atrás sin darle la espalda a Yenmanja, la Diosa del mar, y el último nos lo quedaremos nosotros, hasta el año siguiente, el cual también lo tiraremos al mar, tras volver a repetir el mismo ritual (si fuese el caso).
En Galicia, es la noche de las meigas (brujas en gallego), porque como ellos dicen: “habelas, hailas”. En esa noche hay muchos ritos, tradiciones y leyendas relacionadas con todo lo mágico.
Como en todas las fiestas, el alcohol será uno de los protagonistas de la velada. Sed prudentes con la bebida, y por descontado, si tenéis pensado beber, no cojáis el coche. Id andando, en metro, en tren, o en taxi a vuestro destino.
Sed prudentes y disfrutad de la fiesta. Recordad que esta noche es mágica. No dejéis que nada la estropee!!!!
Besos desde mi blog!!!
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