Revista Cultura y Ocio
Por Sara Yanes, estudiante de 1º de ESO
Una niña entusiasmada,
se adentra en el helado mar.
Chapotea junto a las olas
y se divierte sin parar.
Oculta en una sombrilla,
su madre vigilará.
Y mientras la niña juega,
su padre dormido está.
Cuando el hombre despierta,
es hora de merendar.
Uvas, sandía, piña,
un sabroso manjar.
Un día así de playa,
un éxito será.
Y es que feliz la niña,
a casa volverá.