Li Chen, nacida en Linyi, en la provincia de Shandong (China), llevaba una vida normal hasta el pasado mes de junio cuando, sin motivo aparente, comenzó a llorar y no ha podido parar hasta ahora. Aunque no es un mal parecido, pero esto nos hace recordar a Calvin Inman: el joven que llora sangre.
Esta pobre niña de 12 años de edad sufre este extraño mal que no le permite, lógicamente, hacer una vida normal.... Imaginaros que desesperación por parte de sus padres y de ella misma no poder dejar de llorar desde hace casi un año.
¡Qué cosas!