Una novia para Lord Ned, Sally MacKenzie

Decidida a encontrar marido, la señorita Eleanor, Ellie Bowman, asiste a un baile organizado por la duquesa de Greycliffe, a la que todos llaman con cariño «la duquesa del amor». Sin embargo, no hace caso de ninguno de los caballeros a los que la anfitriona ha invitado precisamente pensando en ella. En realidad, quien le interesa es su elegante hijo, Ned, lord Edward, que ya hace tiempo le robó el corazón… y la hizo arder de deseo. Es Sir Reginald, el gato ladrón de la duquesa, el que le ayuda a hacerse visible al atractivo viudo cuando deja su culote rojo de seda entre los almohadones de la cama de Ned.
Después de cuatro años de luto, Ned no quiere encontrar una esposa. A primera vista, el baile de cumpleaños que su madre ha organizado en su honor no le aporta ninguna candidata interesante. Sin embargo, surge en él un sentimiento inesperado por alguien a quien ya conoce bien, Ellie, que de pronto invade sus sueños y que lo hace de la manera más escandalosa.

Una novia para Lord Ned es la continuación cronológica de La duquesa del amor, aunque literariamente hablando es la primera novela de la serie, ya que La duquesa es un relato que se conoce como el 0.5. Nos encontramos al inicio de la novela con que la duquesa y el duque han tenido tres hijos varones, dos de ellos casados, el primogénito vive separado de su esposa y el mediano es viudo. La duquesa dedica su tiempo a favorecer al acercamiento de las parejas y ese es el motivo principal por el que ha organizado una fiesta para celebrar su cumpleaños y el de sus hijos. Pensando en Ellie, la hija del vicario, a quien la duquesa quiere como a una hija, la invita a pasar unos días en su casa junto a los demás invitados, calculadamente seleccionados para cada una de las damas que acuden al evento. El único problema es que Ellie siempre ha estado enamorada de Ned, el hombre que se casó con su mejor amiga y por el que se confeccionó años atrás un vestido rojo escandalosamente llamativo. Un vestido que llevaba una prenda íntima a juego, una prenda que se ha llevado por error a la fiesta y que Sir Reginald, el gato de la duquesa le ha ofrecido como presente a Lord Ned... El regalo será el detonante que active un sentimiento que estaba latente y que Ned no quería aceptar.

"-¿Qué tenemos aquí?
Ned se inclinó para recogerlo. Rojo, seda -sacudió la tela-, ¿un culote?
-¡Aaayyyyy!
Alzó veloz la cabeza mientras Reggie, prudentemente, abandonaba el cuarto como una exhalación. Una mujer -¡Dios santo, era Ellie Bowman!- se precipitaba hacia él con los ojos fijos en la tela roja".

Lord Ned y Ellie se conocen desde niños, y aunque ella siempre ha sabido que estaba enamorada de él, para él las cosas no son tan fáciles. Después de perder a su esposa en lo que menos interesado está es en enamorarse. Por lo que aprovecha la fiesta de su madre para encontrar a una futura esposa que le dé los herederos que necesita, una esposa adecuada, no una mujer a la que ame. Pero ni sus hermanos están dispuestos a que se case con una mujer inadecuada de modo que harán lo necesario para que la
elegida sea Ellie.
Una novia para Lord Ned es una historia entretenida, en la que nos encontramos con gran variedad de personajes, aunque sin ninguna duda los hermanos Valentine son los más interesantes, y los que nos narrarán sus historias en las próximas entregas de la saga. Con momentos muy divertidos, y con un personaje encantador, como es Lord Reginald, un gato travieso que en ocasiones parece poseer una mente avispada y maquiavélica.
Sin duda, se trata de una novela divertida, entretenida y que engancha, gracias a la prosa sencilla y directa de la autora.