Valores personales
Cuando construimos un proyecto de marca personal, hacemos referencia en una primera fase a la construcción de esa identidad propia a través de la redacción de la misión, la visión y los valores personales.
¿Y qué son los valores? Son convicciones profundas, referentes y principios que tienen las personas, orientan su actitud y determinan su manera de ser y decidir.
Valores en el liderazgo
Uno de los tipos de liderazgo que ha sido objeto de más aportaciones en los últimos años ha sido el llamado liderazgo basado en valores.
Recientemente escribía acera de la marca personal para el liderazgo, por lo que tenemos claro que éste es uno de los caminos en una declaración de objetivos, y por lo tanto de una de las vías de utilidad y aplicación del branding personal.
En este sentido, las funciones y actitudes del líder con marca personal se desarrollan en las siguientes direcciones:
- Dar ejemplo, haciendo de nuestra actividad y nuestras decisiones un referente permanente de coherencia con esos valores.
- Generar valores para la organización, alineados con la cultura empresarial, conocidos y comprendidos por todos los integrantes.
- Reflexionar acerca de su efecto sobre la dinámica relacional, operatividad, funcionalidad, y contribución al éxito empresarial.
A modo de referencia podemos citar una serie de valores representativos inherentes a la función del liderazgo (aunque hay muchas fuentes):
¿Hacia dónde nos llevan los valores? A partir de esta relación de valores el líder asumen una serie de responsabilidades sociales derivadas de su función:
- Respeto a las personas.
- Coherencia en su actitud.
- Consecuencia de sus actos.
Valores en la organización
Son el marco del comportamiento que deben tener sus integrantes, y dependen de la naturaleza de la organización ( su razón de ser); del propósito para el cual fue creada ( sus objetivos); y de su proyección en el futuro ( su visión).
Para ello, deberían inspirar las actitudes y acciones necesarias para lograr sus objetivos.
Al llegar a una organización con valores ya definidos, de manera implícita asumimos aceptarlos y ponerlos en práctica. Es lo que los demás miembros de la organización esperan de nosotros.
Los valores están en cierto modo ligados a la educación más que a la formación, y su componente es más emocional que racional. Y en este sentido podemos afirmar que, en lo que respecta a los valores, las cualidades que las organizaciones buscan en los mejores profesionales son:
- Ser una persona íntegra, honesta con personalidad y con carácter.
- Comprender la trascendencia del trabajo más allá del aspecto económico.
- Reconocer los propios errores y valorar los aciertos en los demás; es decir, la humildad.
- Mantener el optimismo como fuente de constancia y superación y motivación para los demás.