Vista del lago de Yekaterimburgo
Ya está, pasamos la frontera natural entre Europa y Asia, los Urales. Nuestro tren nocturno desde Kazán nos había llevado toda la noche subiendo la cadena montañosa para transportarnos a un nuevo continente. El viaje en segunda clase la verdad no fue uno de los mejores del viaje, uno podría esperar que al dormir en “Plastkart” tendríamos más problemas, pero en nuestro caso fue al revés, ya que nuestra compañera de compartimento tenía problemas al respirar. Así que toda la noche escuchábamos sus ronquidos, todo esto unido a un espacio reducido el cual intensificaba los sonidos, acabamos escuchando más a ella que el tren en movimiento… Incluso con tapones en los oídos. Problemas que nunca se pueden esperar, pero que hay que contar con ellos.
Nuestra compañera de “cuarto” se bajo en una parada temprana por la mañana, así que cuando nos despertamos estábamos solos y ocupamos todo el compartimento para preparar nuestro pequeño desayuno y aún tuvimos tiempo de estirar las piernas y hablar con otros extranjeros que había en el tren. En este caso encontramos a Jorge, un señor jubilado de Barcelona que estaba haciendo el trayecto desde Moscu hasta Vladivostok sólo. Para que después digan que es un viaje “peligroso”, ah y ojo que su nivel de inglés no era uno de los mejores, y tampoco sabía ruso. Así que no hay excusas, para hacer este viaje
Nuestra llegada a Ekaterimburgo fue por la mañana sobre las 8. Nuestra idea era ir a ver Ganina Yama y después merodear un poco por la ciudad. Nada más salir de la estación fuimos a dejar las mochilas en la consigna. Una vez más nos encontramos con gente muy simpática que nos ayudo con sus indicaciones para encontrarla. La verdad nos habían hablado antes del viaje de que la gente en Rusia no suele ayudar mucho, pero no era nuestro caso. Imagino que siempre ayuda a pedir las cosas con amabilidad, una sonrisa, paciencia y tratar de hablar en el idioma local, para conseguir un poco de ayuda.
Lugar donde el cuerpo del Zar y su familia fue enterrado en primer lugar.
A la salida de la estación nos vimos rodeados de varios tours y taxis que estaban a la caza del turista. Teníamos tours de todos los tipos, a los urales, por la ciudad, Ganina Yama, a otros poblados y ciudades cercanas… Dimos una vuelta por los alrededores de la estación con la esperanza de encontrar algún tour barato o alguna forma de llegar a Ganina Yama, ya que no hay autobús, ni tren que nos dejara cerca. Lo más cercano era un tren que nos dejaría a 3-4 km del lugar y después tendríamos que caminar por el bosque hasta encontrar el sitio. Así que nuestra única opción era o un tour o un taxi. Al final nos dejamos “abordar” por un “tour”, que salía en ese momento. Lo de tour es un decir ya que lo único que hizo fue llevarnos al sitio dejarnos allí por un par de horas y después venir a recogernos. Así que si tenéis ganas de ir a Ganina Yama, comprobar si podéis negociar el precio de un taxi que os lleve y recoja por un precio inferior al de los tours.
Ganina Yama, fue uno de los primeros lugares donde los bolcheviques enterraron los cadáveres del último zar de Rusia y su familia. Después de ser fusilados en la casa Ipatiev, en Yekaterimburgo, sus cadaveres fueron llevados a este foso la noche del 17 de Julio de 1918, y enterrados allí. Cuando el ejército blanco se acercaba a la ciudad, el ejército rojo cambió el lugar de enterramiento. El lugar en la actualidad se ha convertido en un lugar de peregrinación, dispone de 7 iglesias ortodoxas de maderas, cada una en representación de uno de los miembros allí enterrado y varios edificios pertenecientes al claustro de los monjes que viven allí. El lugar es un remanso de calma donde se puede escuchar la naturaleza y está muy alejado del turismo de masa. Se puede observar que los pocos viajeros que se pueden encontrar allí son en su mayoría rusos. En la entrada del recinto se pueden ver fotos de la familia Romanov tomadas por ellos mismos. A la espera de nuestro “tour” nos fuimos a comer al único “restaurante” de la zona, donde comimos, pescado servido con una salsa y patatas cocidas, acompañados de Kvas (esta fue nuestra bebida oficial en Rusia). Por sólo 3 euros al cambio para dos personas. Llegado la hora acordada con el conductor este apareció y nos llevó de vuelta a la estación de tren.
La comida más barata de todo el viaje 3 euros por todo incluido bebida
Antiguamente durante la época comunista la ciudad fue llamada: Sverdlovsk till 1991, en conmemoración de uno de los dirigentes de la revolución Bolchevique, el cual curiosamente fue el mismo que se le atribuye la orden de fusilar a los zares en Yekaterimburgo. Hasta hace poco aún se podía encontrar en la estación de trenes el nombre antiguo. Desde allí fuimos a ver la estación cogimos el metro (sólo hay una linea de metro) a la zona Sur de la ciudad, donde había algunos lugares curiosos para ver. Salimos en la parte del museo botánico, donde se encontraba el circo de la ciudad y claro está los jardines. Desde allí nos dirigimos de vuelta a la estación de trenes ya que los lugares que queríamos ver se encontraban de camino de vuelta.
Uno de los monumentos que queríamos ver era un curioso monumento al teclado informático, que ya sólo por lo curioso del mismo merecía una pequeña visita. Curioso como un elemento que usamos casi a diario sirva de monumento, según el arquitecto simboliza la comunicación entre Europa y Asia. En la misma zona también pudimos encontrar un monumento dedicados a los Beatles y un par de casas decoradas por artistas. Lo curioso fue el nombre que los artistas le dieron, calle mi museo. Desde allí nos dirigimos al “lago” que forma el río Iset, donde se puede observar la belleza del lugar. Si estás en invierno tienes ante ti un maravillosa pista de patinaje, en el centro de la ciudad. También puedes observar el monumento a los fundadores de la ciudad: Tatischev y De Genin
Cerca de aquí se encuentra la iglesia de la ascención o sobre la sangre. Esta iglesia se construyo sobre la casa del mercante Ipatiev en la cual el último zar y su familia fueron fusilados. Durante la época comunista se mandó destruir la casa, para que no sirviera como lugar de peregrinaje de los pro zaristas. Una vez el régimen comunista cayo, se abrió la mano para que se construyera la iglesia. El templo es básicamente un monumento a los zares, con muchas imágenes de ellos y de estatuas.
Detrás de la iglesia podemos encontrar uno de los edificios más bonitos (depende del gusto de cada uno ;)) el palacio de Rastorguevs-Kharitonovs. El cual fue brevemente la casa oficial del alcalde de Yekaterimburgo, hasta que Putin mando desalojar ese edificio. En la actualidad sólo se pueden ver los jardines.
Iglesia construida en el lugar donde el Zar Nicolas II fue asesinado con su familia
A la vuelta nos fuimos a comprar a un supermercado cerca a la estación de tren, donde nos avituallamos de comida para los próximos dos días y medio en tren. Aún tuvimos tiempo de ver la estación de tren nueva y darnos un paseo por la vieja, que está al lado de la actual. Siguiente destino: Irkutsk y el lago Baikal.
¿Que ver y hacer?
- Ganina Yama
- Parque botánico
- Iglesia de la anunciación o de la sangre
- Monumento al teclado
- Lago central
- Excursión a los Urales
- Visita al monumento entre Asia y Europa en los Urales
- El cementerio a la mafia
- El circo
- El edificio de la universidad.
- Las cuevas de hielo de Kungur
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