Desde las latitudes sur se podrá disfrutar de una maravillosa vista hacia el centro de nuestra galaxia, con las constelaciones de Scorpius y Sagittarius como principales protagonistas, en una zona tremendamente rica y densa en estrellas. Sagittarius es una constelación tremendamente rica en estrellas y objetos de cielo profundo, en esta constelación hay más objetos catalogados por Messier que en cualquier otra constelación, 15 objetos en total. Durante el mes de julio, el cielo en las latitudes norte se verá dominado por la constelación de Hércules (entre las estrellas Arcturus en la constelación de Bootes y Vega en la constelación de Lyra, dos de las estrellas más brillantes del cielo).
Desde las latitudes sur se podrá disfrutar de una maravillosa vista hacia el centro de nuestra galaxia, con las constelaciones de Scorpius y Sagittarius como principales protagonistas, en una zona tremendamente rica y densa en estrellas. En la constelación de Sagittarius se encuentran numerosos objetos de cielo profundo muy interesantes, entre los que destacamos a la Nebulosa de la Laguna (objeto M8 del catálogo Messier), una nube de gas que presenta zonas con nubes protoestelares que están colapsándose, de donde nacerán nuevas estrellas. Esta nebulosa tiene una magnitud visual de 5 y puede ser contemplada con unos simples prismáticos. En la misma constelación se encuentra el famoso cúmulo globular M22, el cual es visible a simple vista si las condiciones atmosféricas son favorables. Este cúmulo se encuentra a una distancia aproximada de 10.400 años luz y está compuesto por unas 70.000 estrellas. En la constelación de Scorpius destacamos a la estrella Antares, una supergigante rojiza que brilla 9.000 veces más que el Sol.
La más importante lluvia de meteoros del sur tendrá lugar durante este período, alcanzado su máximo el día 30 de julio. Se trata de la lluvia Delta-Acuáridas, con radiante en Acuario y una frecuencia aproximada de 20 meteoros por hora.