Por Jorge GaracotcheMúsico, compositor, líder del grupo Canturbe y miembro de AMIBA.
Con Fervor: En Argentina, el Rock Progresivo, siempre, fue un nicho fiel, pero, pequeño, ¿cómo surgió la riesgosa idea de lanzar un Sello Independiente hacia ese mercado?
Felipe Surkan: En realidad, nunca estuvo planificado, se fueron dando ciertos acontecimientos que cambiaron el rumbo de mi vida. Mi vínculo con la música lo tengo desde mi infancia. Gracias a mi madre fuimos creciendo escuchando la música de Los Beatles. Mi vieja era una roquera, ella era la disc-jockey de nuestros asaltos (bailes de adolescentes), pasaba los simples y LPs de Creedence, John Lee Hooker y otros temas que estaban de moda a fines de los años sesentas y comienzos de los setentas. Algo inusual en las demás casas de amigos. Luego de la separación de los muchachos de Liverpool, continué la carrera de Paul McCartney, sus discos solistas y Wings. Todos aprendimos inglés, gracias a traducir sus letras. Ella tenía la costumbre de escribir en lápiz el significado de las canciones en los inserts de los vinilos. Aproximadamente en 1975 mi hermana se pone de novia y llegan los primeros de Rock Progresivo. Ahí mi cabeza estalló y comencé a coleccionar los LPs de Génesis, Yes, Preemiata Forneria Marconi, entre otras, y mis bandas favoritas: Gentle Giant, Van Der Graaf Generator y Camel. De Rock Nacional, nada, sólo miraba hacia afuera.
Cuando hice el servicio militar entre 1981 y 1982 (durante la guerra de Malvinas), tenía muchos compañeros con prórroga que escuchaban esa música, fue así que me puse al día completando la discografía de todos los popes del género. Pero la historia comienza a cambiar en la década del noventa, cuando escuchaba el programa especializado La Llave Oculta, que conducían Darío Carzino y Jorge López en una FM de Banfield. Allí descubrimos que la Música Progresiva no había muerto en los ochentas, como la mayoría pensaba, y comenzó el resurgimiento del género con la música Neo Progresiva. Descubrí por fin el Rock Progresivo Argentino, de cual no conocía absolutamente nada. Cuando termina este ciclo radial, mi inquietud como coleccionista y mi deseo por continuar la Cruzada del Rock Progresivo, descaradamente inicié mi propio programa de radio, el cual bauticé Viajero Inmóvil, nombre que tomé de la mala traducción del disco de Camel que editó en 1982.
El inicio del ciclo comenzó en octubre de 1998. Los conductores del programa que escuchaba me enseñaron cuáles eran los sellos que debía contactar para recibir material promocional para pasar en los programas. Fue así que les escribía por carta solicitando el material. Luego llegó la tecnología, y mi programa tenía el auspicio de un Ciber, desde donde comencé a enviar los primeros mails. Cierto día, el dueño de un sello húngaro, me preguntó si tenía CDs de bandas argentinas para canjear. Esto recién comenzaba, ya existían algunas producciones independientes y con 3 bandas: Tanger, Sergio Álvarez y Diosa Arcana, comenzó Viajero Inmóvil Diffusion, una distribuidora de CDs de Grupos Progresivos Argentinos Independientes. Los primeros canjes fueron para incrementar mi colección, luego comencé a traer discos para mis amigos de la música y por último los ofrecí a las disquerías especializadas. Tuve mi primer viaje al Festival Baja Prog de México en el año 2001, y allí conocí a la mayoría de los sellos especializados del mundo, afirmando mi relación con todos ellos. A mi regreso, el programa radial ya había finalizado, pero continuaba intercambiando CDs.
A comienzos del año 2002, surge la idea de crear Viajero Inmóvil Records, un sello dedicado exclusivamente a la Música Progresiva. Con la edición de Hyacntus-Elydian se inicia esta aventura. En ese momento, yo siempre trabajé con mi padre en un depósito de hierros, teniendo además una carrera de escultor, que trabajaba con los materiales que conseguía allí. Luego se dio todo con naturalidad, la música había invadido mi vida y de a poco, fui dejando mi anterior oficio, al ver que todo crecía repentinamente. El catálogo que había llevado a México no superaba los 15 títulos. Investigando, relacionándome con otras personas, fui consiguiendo más discos para distribuir y casi mágicamente, fueron apareciendo ciertos títulos que me interesaban incluir en mi sello. Buscando editar discos perdidos, joyas de los setentas o apoyar a las bandas que estaban en ese momento. La respuesta a tu pregunta, quizás es corta: solo motivado por el ímpetu de mostrar la música que a uno personalmente le gusta y que considera que merece ser editada.
F: Siempre creímos que los productores discográficos basan sus ganancias en contratos leoninos y en una disimulada explotación de los artistas ¿cuál es la postura ética de un sello que sale de esos cánones?
S: Desde un principio, y hasta el día de hoy, mi relación con los músicos pasa por la palabra (más allá que luego hay un contrato de por medio). El lema de Viajero Inmóvil Records es: “Difusión de Grupos Progresivos Independientes”, o sea, que creo fervientemente en la independencia de los músicos. Cuando hacemos un contrato, queda bien en claro que la música siempre pertenece a los artistas, no me quedo con ningún derecho. Simplemente realizo una co-producción pagando un porcentaje de las regalías, por una cantidad determinada de CDs. Cada arreglo que hago es consensuado por ambas partes.
F: Seguramente, dentro y afuera tuyo hay una tensión entre el productor y el melómano ¿cómo ves que negocian esas posturas que parecen excluyentes?
Felipe Surkan en su puesto de discos
en Parque Centenario.
Foto: Teo Surkan.
F: ¿Cuándo empezaste a pensar que el rock argentino era exportable?
S: Desde que tenía mi programa de radio, me di cuenta que había mucho interés de parte de otros sellos Progresivos de otros lugares del planeta. Una vez que tuve mi sitio, pronto llegaron los requerimientos de las tiendas japonesas. Son quienes sostienen al resto de los sellos del mundo, ya que el 50 % de las producciones, básicamente van a parar allá. De alguna manera, yo comencé a recoger todo el material de Música Progresiva Argentina para ofrecerlo a otros colegas de distintos países. Así comenzaron los canjes / ventas con otros sellos y distribuidores especializados. Ellos siempre estuvieron expectantes por nuestra música.
F: ¿Cómo explicás la gran recepción que tiene el Rock Argentino en otros países?
S: Lo que sí puedo confirmar, es que en nuestro país tenemos una gran variedad de estilos completamente disímiles entre cada banda. No hay una corriente marcada o una línea musical a seguir, como existe en otros lugares del orbe. Siempre comparé a nuestra música con el fiel reflejo de lo que es Argentina, un crisol de culturas diversas que en un momento comenzaron a mezclarse. Está plenamente comprobado, por las experiencias que muchos tuvimos hablando con extranjeros, que todo suena a tango. No hay artista que no pase por aquí. Muchos que nos iniciamos tocando la guitarra, aprendimos nuestras primeras canciones con zambas. Por alguna razón, o por ósmosis, todos viran hacia la música porteña. No hacemos la mejor música progresiva del mundo, pero les puedo asegurar, que las variables sonoras que poseemos, son muy diferentes al resto de los países. Esto es lo que agrada a esos oyentes.
F: Hace pocos meses inauguraste un espacio para shows privados en donde también se pueden ver tus esculturas.
S: Es otro de los proyectos encarados en el último tiempo. Fue un gusto personal que soñé por años. La creación del Espacio Viajero Inmóvil, un lugar dentro de mi propiedad, donde junto mi faceta artística con mis esculturas, sumado a un rincón de recuerdos con objetos que formaron parte de mi vida. Todo esto acondicionado para realizar shows privados para unas 25 personas, en el cual podamos disfrutar de una velada de música y amigos.
F: Siempre es difícil el momento de decidir qué se acepta para integrar el staff del sello y qué se rechaza ¿Cuáles son las condiciones de Viajero?
S: Para mí, es bastante sencillo. Primero, me tiene que gustar la música o el proyecto, luego voy por ella, o como en los últimos años, simplemente me llega, como por arte de magia. Me contacto con los músicos o quienes tienen el derecho y les ofrezco mis condiciones, que no son tan diferentes a las que otros ofrecen. Hoy aún es más fácil, al incorporar la parte digital, ya no hay tantas complicaciones en aceptar o no a una banda. Por supuesto, que hay bandas que no cumplen con mis expectativas y simplemente les ofrezco ser parte de la distribución. Si hay algo que conozco bastante bien, es el gusto de mis clientes y conocer bien cuál es el potencial de venta de cada producto. Aunque en mi sello hay ciertos títulos, que aún sabiendo que no venderían mucho, los he editado por su calidad musical.
F: Hay una notoria decisión del sello de ir al rescate de material del rock argentino de la primera época ¿cuáles son los motivos artísticos y cuáles los comerciales?
S: Creo que producen un placer especial, el rescate sonoro es algo apasionante. Por suerte he tenido muchos en mi sello, y cada uno de ellos me ha dado una satisfacción personal indescriptible. Como cualquier otro hecho artístico, el logro final produce algo dentro de nosotros. Siempre se parte, desde el punto de vista, de que otras personas puedan descubrir alguna música interesante. En el ambiente de la Música Progresiva, no existe el lado comercial, se hace porque a uno le gusta y no por su rédito. Si esto prospera, bienvenido sea, será para cubrir a otra banda que no genere tanto ingreso.
F: Los músicos que le apostamos fuerte al arte de tapa hemos tenido grandes discusiones en los sellos porque una buena tapa implica más trabajo y mayor gasto, vos tenés toda una postura al respecto, me gustaría que nos la cuentes.
S: Yo corro con una cierta ventaja al provenir del mundo del arte, como escultor durante 10 años conviví con muchos artistas plásticos, otra rama del arte que me apasiona. Así que mi continuidad como artista la vuelco en el diseño gráfico de los discos del sello. Pero siempre en un consenso con los músicos. Para esto utilicé muchas veces imágenes de pintores o dibujantes amigos, como Daniel Oronó (quien hizo varias tapas y el logo del sello), Enrique Rocca y otros. Otras, simplemente las traen las bandas y las acomodo al diseño especial que tiene el packaging de Viajero Inmóvil Records. Otra cosa en la cual soy muy cuidadoso, y es algo que aprendí con los años, es el rol de productor musical. Te puedo asegurar que la mitad de los discos editados se reorganizó el orden de los temas bajo un criterio estético y sonoro, que considero que es el que le gusta a la mayoría de los que escuchamos este tipo de música.
F: El Sello está cumpliendo 20 años, ¿en qué estás pensando a la hora de recordar tantas historias que fueron formateando esta aventura artística?
S: En casi 20 años de trayectoria, tuvimos buenos años y otros no tanto, pero, finalmente, quedamos establecidos gracias al público y los otros sellos/tiendas/distribuidores que siempre demandan nuestros CDs y también los DVDs, assettes, LPs y libros, que ofrecemos a través del sitio. En realidad, el sello cuenta con más de 80 ediciones, pero la distribución y productos ofrecidos es de más de 1000 títulos. Desde hace 7 años, estoy en la Feria de Discos del Parque Centenario, que esa es otra historia muy interesante para contar. Es un lugar mítico y fantástico, donde se reúnen todos los domingos por la mañana los melómanos de distintos gustos musicales. Como un ritual. Más allá del sello, mi medio de vida es la distribución de música, tanto física como digital (aunque por ahora no produce mucha ganancia), siempre intentando ayudar a que los músicos estén en todas las tiendas digitales.
Tenemos el Canal de YouTube del sello:
https://www.youtube.com/channel/UCoceMIjg0dCazGntJp99bNQ
Además de ofrecer los discos virtuales a través de Bandcamp:
https://viajeroinmovilrecords.bandcamp.com/
F: Sé que en este último tiempo Viajero Inmóvil ha dado un paso hacia nuevos rumbos haciendo una lectura de otras experiencias sonoras y musicales…
S: El año pasado, incorporamos un nuevo emprendimiento: Viajero Inmóvil Ex[P]rimental, que es un canal sonoro que explora Músicas Experimentales. Dedicado a todos aquellos artistas que cuestionan los límites de los lenguajes sonoros, de los recursos instrumentales y sobre todo, los límites de sus propios pensamientos. En este submundo se encuentra la Música Electroacústica, Improvisación, Música Concreta, Música Experimental, etc. Todo bajo la curaduría del músico cordobés Gonzalo Biffarella.
https://viajeroinmovilexprimental.bandcamp.com/
También, tiene su Canal de YouTube:
https://www.youtube.com/channel/UCiMnF2Yx6mvDapRx14Sdc9w
Jorge Garacotche