TRADICIONAL POR LA CRIANZA E INNOVADOR EN EL COUPAGE
Se trata de un vino blanco elaborado por bodegas Celler del Roure , siguiendo una novedosa (no por nueva, sino por antigua y desaparecida) técnica de crianza en tinajas de barro soterradas, en una bodega construida en época medieval y recientemente recuperada. Su nombre significa “cucharón” en valenciano, empleándose también, como en el caso de este vino, para definir a un renacuajo.
Vista. Amarillo pajizo muy pálido (casi acerado) con ribetes aceitunados, siendo limpio y con un brillo bastante acusado. Al agitar se ve algo denso, dejando una lágrima marcada y de caída lenta.
Nariz bastante intensa, dando en un principio notas cítricas (limón, mandarina) que pronto se torna hacia la fruta blanca (pera, manzana asada) y continúa evolucionando hacia sensaciones algo más vegetales (hinojo y laurel). Al dejar reposar la copa unos minutos, se distinguen claramente notas tropicales (piña) y herbáceas por debajo de un frente ligeramente alcohólico.
En boca la entrada es bastante fresca y amable, con un paso amplio y glicérico, teniendo bastante peso y estructura en boca, otorgado por la crianza con lías. El centro nos ofrece una combinación bastante equilibrada entre fruta de hueso (albaricoque, níspero), manzana madura y pomelo, dando algo de flores blancas (azahar) por retronasal. La acidez, presente pero no consigue imponerse a la típica sensación mediterránea de un blanco maduro y algo pesado. El final es muy largo, con un posgusto equilibrado entre recuerdos dulzones de hollejo blanco maduro, vegetales con viveza (helecho) y amargores finales (corteza de lima) que se mantienen en el tiempo dejando un recuerdo limpio y agradable.
En conclusión nos vemos ante un vino complejo en cuanto a las notas primarias que nos ofrece el coupage de sus cinco variedades, que tiende a encasillarse en su zona de producción respecto a la madurez y sensación licorosa. Destaca la estructura del cuerpo, dado por las lías y por esa curiosa elaboración en tinaja de barro, que ha “curado” el vino sin aportarle notas amaderadas. Para definirlo de manera gráfica, Es como un vino fermentado y criado en barrica sobre lías, pero sin barrica.
La acidez justa y los amargores algo subidos aconsejan consumirlo desde ahora hasta un máximo de año y medio. Yo lo maridé a unos 9 º C con un aperitivo a base de mejillones y berberechos al vapor y después tomé el resto (tras atemperarlo un poco) con un arroz negro con “sepionet”, cumpliendo perfectamente su papel en los dos casos.
Tipo de vino: blanco con crianza en tinaja de barro
D.O./Zona: Valencia
Variedades: 35% chardonnay, 25% Macabeo, 25% malvasía, 10% Pedro Ximénez y 5% verdil
Grad. Alcoh.: 13º
P.v.p. aprox.: 6 - 7 €
Bodega: Celler del Roure. Partida les Alcusses. Moixent. Valencia. Tlf. 962 29 50 20
Mail: [email protected]