La artista visual Ana de Orbegoso, nacida en Lima pero actualmente residente en New York, ideó un proyecto artístico, Vírgenes urbanas, en el que aplica tradición religiosa con tradición peruana donde, a través de un conjunto de fotografías de mujeres peruanas narra otra historia sobre la incidencia de la virgen María -finalmente otra mujer- en la vida cotidiana de las mujeres de Perú, una revisitiación que podría extenderse como concepto a América Latina.
El proyecto está de tour por Perú y el 3 de abril llega con pasacalle de Sikuris en Puno, capital folklórica del Perú.
Así lo cuenta al artista:
“Las “Virgenes Urbanas” son fotografías basadas en pinturas coloniales, revisadas y reinventadas para reflejar realidades e ideales contemporáneos. Para éste proyecto, fueron utilizadas imágenes históricas de pinturas religiosas de la Escuela de Cusco. Fueron sustituidos personajes, fondos y símbolos por elementos que celebran más al Perú de hoy, en vez de los ideales del conquistador.
De acuerdo a la típica estrategia de dominación, los conquistadores españoles de las Américas utilizaron el arte como propaganda para su causa. Pinturas religiosas representando imágenes con rasgos caucásicos fueron usados rutinariamente por los colonizadores alrededor del mundo imponiendo las ideas, religión y estereotipos occidentales. Los maestros pintores europeos enseñaron a los pintores locales de las colonias a reproducir su estilo pictórico y a mantener el uso de símbolos y rasgos occidentales en las obras de arte religiosas. En las Américas, muchas de las pinturas giraron alrededor de una figura central femenina, la imágen de la Virgen, la cual representaba el ideal al que las mujeres nativas estaban supuestas a alcanzar: pureza, benevolencia y sumisión.
Este trabajo usa como fondo pinturas con la imagen de la Virgen. Al remover los rostros clásicos Europeos del arquetipo divino de las pinturas coloniales y reemplazándolos con imágenes de mujeres Peruanas actuales, uso el arte como propaganda para conseguir un mensaje diferente al de los maestros pintores de la colonia, uno que refuerza el valor de la mujer Peruana de hoy, apropiándose del pasado para convertirlo en presente y generar una mirada hacia el futuro. Las “Virgenes Urbanas”, orgullosas , autosuficientes y festivas, son figuras de carne y hueso que habitan un mundo que incorpora la iconografía y la grandeza de la antigua y moderna cultura Peruana.
Odi Gonzáles, poeta cusqueño, colaboró en este proyecto escribiendo poemas dándoles voz y cotidianeidad a los personajes de las obras en Español, Inglés y Quechua.
Si originalmente los cuadros se encontraban en palacios y espacios sagrados orientados al culto, las “Virgenes Urbanas” salen a los espacios públicos a respirar, interactuando con su entorno urbano, accesibles a todos. Paralelo a la muestra fotográfica se lleva a cabo un evento en el que las imágenes interactúan con los pobladores. A través de una convocatoria hecha a los artistas locales, con el espíritu de que éste evento se convierta en una interacción de obra entre artistas, se crean diversas expresiones. Esta obra ha ocasionado caminatas por sitiales históricos, sesiones de poesía, paseos y pasacalles por grupos de baile acompañados por músicos.
El punto de partida de ésta presentación itinerante ha sido la ciudad de Cusco; paradigma del mestizaje en el Perú, la fusión de las culturas indígenas y Europeas. Es en ésta ciudad, donde se superpone la piedra tallada colonial a la pared Inca, donde el cristianismo y la espiritualidad andina conviven, es que las “Virgenes Urbanas” comenzaron su travesía el 31 de octubre del 2006.
Le siguieron exhibiciones y caminatas en las ciudades de: Lima en el ICPNA de Miraflores y Museo de la Nación; Trujillo en la Casona Orbegoso (+Huaca del Sol y La Luna + Huaca de la Sra. de Cao); Chiclayo en el INC (+Valle de las Pirámides de Túcume); Piura en la Alianza Francesa; Sullana en La Galería; Cajamarca en la Galería Cultural “Tila Becerra Cieza”; Cajabamba en la Municipalidad; Huancayo en el Instituto de la Cultura y la Juventud y Museo de Sitio de Wari Willka; Ayacucho en la Sala de Cultura de la Dirección Regional de Cultura y en el pueblo de Quinua hasta el momento.
Esta obra tiene el firme propósito de seguir recorriendo territorio peruano con la intención de difundir, inspirar, e integrar”.