Éric Abidal es el veterano de las mil batallas, no solamente en lo que al fútbol se refiere, también en su vida al haber superado la extirpación de un tumor en el hígado. Le dio un zurdazo al tumor y volvió más fuerte que nunca en medio una demostración de afecto de todo el Barcelona y de toda la España futbolera. Plantó la bandera del Barcelona en Wembley cuando Puyol le dio la cinta de capitán para que levantara la champions, y termina el año inmerso en los festejos por la obtención del Mundial de clubes.
Éric Abidal llega al Barça la temporada 2007/08 como sustituto del holandés Giovanni van Bronckhorst, en la que es la primera experiencia del francés fuera de su país. El francés, que disputó 30 partidos de Liga, 10 de Champions y 6 de Copa, compartió el lateral izquierdo con Sylvinho, aunque en más de una ocasión Frank Rijkaard lo utilizó como central.
La temporada 2008/09 logra el triplete con el Barça, pero es un año lleno de desgracias para Abidal. Primero, mse lesiona ante el Espanyol y se pierde ocho semanas de competición. Y cuando vuelve, es expulsado en las semifinales de la Copa y de la Liga de Campeones, lo que le impide participar en las dos finales que gana el Barça en Valencia y Roma respectivamente. Acaba disputando 31 partidos entre las tres competiciones.
En el ejercicio 09/10 alcanza un estado de forma óptimo, realiza asistencias de mérito, pero nuevamente las lesiones limitan su participación. Juega 17 partidos de Liga y 8 de Champions.
La temporada 2010/11 es la más complicada de todas para Éric Abidal, a quien se le detecta un tumor en el hígado a mediados de marzo. Demostrando un espíritu de superación y una tenacidad increíbles, Éric Abidal vuelve a la competición sólo seis semanas después, en un Barça-Madrid (1-1) correspondiente a la vuelta de semifinales de Champions. Abidal es el titular izquierdo en la final de Wembley -se perdió la de Roma por sanción- y el capitán Puyol le deja ser el primero en levantar el trofeo de campeones una vez superado el Manchester United (3-1). En Londres disputa su partido número 150 como azulgrana.