Vuestras consultas: el compromiso

CONSULTA:

Buenas tardes. Soy una chica de 21 años, y he tenido una relación de pareja durante 1 año y 2 meses, y dicha relación se rompió hace ya 4 meses. El caso es que él me dijo que quería dejarlo un tiempo, que necesitaba estar sólo, que siempre ha tenido parejas largas y ha estado poco tiempo sólo. Yo lo pasé muy mal, y lo estoy pasando mal, estuve un mes sin saber nada de él, ni verle ni hablar con él, me fui de viaje durante un mes para poder estar mejor porque me era imposible seguir encerrada llorando en casa. Y cuando volví de viaje lo volví a ver, él puso una cara de felicidad que nunca había visto, desde entonces nos veíamos de vez en cuando, y él estaba con una actitud muy buena, pero cuando le hablaba del tema de nosotros, se enfadaba, decía que no me confundiera y que el sabía que volvería conmigo pero que no sabe si dentro de 2 semanas, 2 meses o 2 años... Dice que tiene miedo a volver y que luego se rompa otra vez, que las segundas partes nunca fueron buenas... Según él siempre me dice lo mismo, pero para mí, como me lo dice de forma diferente no veo que sea igual, creo que se contradice. Y bueno lo que más me resulta inquietante y que es mi gran duda, es que cuando estoy con él, en persona, se comporta muy cariñoso, y me encuentro muy a gusto, pero en cambio cuando no estamos juntos, y hablamos vía Internet, no me habla, cuando hablamos está seco y tajante, no se despide, o se despide y se va sin dar opción a decirle adiós. Y no sé que más hacer. Un día me dijo que se había puesto un límite, y que era cuando volviera de las vacaciones, que eso es dentro de un mes, pero no entiendo esa actitud, que cuando está conmigo muy bien y cuando no, está tan raro. Yo quiero volver con él, y llevo ya mucho esperando, pero su comportamiento me preocupa mucho... Gracias, espero que me podáis decir algo de lo que psicológicamente le puede pasar a él, o con mis palabras, a mí.

RESPUESTA DE SOMOSPSICO:

Estimada lectora:

Las relaciones de pareja no siempre resultan sencillas. Es normal que en ocasiones haya disputas, roces, puntos de vista enfrentados e incluso actitudes distintas ante lo que cada uno desea de la vida.

Es normal que en estos momentos te encuentres confundida ante lo que te está sucediendo, pues seguramente no llegues a comprender del todo esos cambios de actitud de tu ex-pareja con respecto a ti según qué contexto.

Lo único que podemos decirte es que trates de no reducir tu vida a este único asunto, pues a veces hace falta algo de tiempo para que las cosas terminen por aclararse, en un sentido o en otro, por lo que darle demasiadas vueltas y tratar de “forzar la situación” puede acabar por complicarla aún mas. Por eso, quizá sería bueno para ti que lograses no enfocarte tanto en lo que ocurre o en lo que ocurrirá, dedicándote a otros asuntos como el trabajo, la familia o tus amistades para continuar creciendo como persona.

A raíz de lo que nos cuentas, es posible que él aún no tenga muy claro cómo actuar. Quizá por un lado desee estar contigo porque le haga feliz el estarlo, pero por otro sienta miedo de hacerte o incluso de hacerse daño a si mismo si algo sale mal. Seguramente no lo pase bien cuando tratas de aclarar la situación y dialogar con él sobre el tema de retomar la relación, y esto no es más que otro síntoma de sus miedos e inquietudes.

Por tanto, a nuestro modo de ver y sin que sirva para condicionar tus decisiones, te recomendaríamos que no tuvieras prisa con todo esto. Céntrate en tener claro que en ningún caso es culpa tuya todo lo que está ocurriendo, y que no tienes que arrepentirte de nada. Simplemente, trata de entender que todos pasamos por momentos en los que parecemos no saber qué hacer, o nos preguntamos si habremos elegido el camino correcto. Y es posible que algo así le esté sucediendo a él.

Esfuérzate en disfrutar de todo lo que la vida está dispuesta a ofrecerte, valora cada cosa positiva que te ocurra cada día y no te obsesiones por buscar una solución inmediata. Dáte tiempo a ti misma y también a él para que, finalmente, toméis una decisión.

foto|Salvatore Vuono