El milagro por el cual gran parte del público chileno venía rezando, podría tener alguna chance mínima de llegar a materializarse. Segovia, el hombre elegido por los clubes chilenos para terminar con el gobierno de Harold Mayne-Nicholls, fue inhabilitado por el directorio de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional. El motivo esgrimido en contra de la asunción del empresario español es que viola un artículo del estatuto que le impide ser dirigente de la ANFP a aquellos que tengan empresas que mantengan contratos con la propia asociación o sus instituciones. Segovia es presidente y dueño de Unión Española y a la vez hace negocios con la Universidad Sek, también de su propiedad, en algo señalado por el directorio como una relación antireglamentaria.
Pese a que Segovia moverá cielo y tierra -tiene la venia del presidente chileno Piñera- para ocupar la presidencia, el panorama queda envuelto de dudas, sobre todo por la continuidad de Marcelo Bielsa, quien había dejado más que claro que él había llegado de la mano de Mayne Nicholls y no podía trabajar con Segovia, debido a que no compartían los mismos ideales para el proyecto de la selección chilena. Bielsa tuvo varios roces con los clubes chilenos por la citación de jugadores y estos fueron los que justamente apoyaron a Segovia, bien conscientes de que Bielsa se iría.
Segovia calificó esta decisión como un golpe de estado. Sin embargo, desde el lado dirigencial que anula la asunción de Segovia explican que su lista ganó, pero quien queda inhabilitado para ejercer como directivo de la ANFP es solamente él por sus vínculos comerciales.
Hay una chance muy mínima de que Bielsa se quede. No parece que Mayne-Nicholls fuera a volver pese a esta decisión y el enfrentamiento con los clubes está bien definido. El Loco rechazó el ofrecimiento de River, algunos sueñan con él para Boca, pero podría llegar a ser tentado por el Inter si los resultados no acompañan a Rafa Benítez.