Existen cientos de modelos educativos y de enseñanza en el mundo. Pero, para poder entender bien los conceptos y los diferentes métodos, debemos ser conscientes de la gran diferencia que tenemos entre la educación y la enseñanza. Y por supuesto, saber quien es el responsable de cada una de las áreas. En los últimos años, parece que se nos han olvidado mucho los roles de cada uno. Además de haber perdido muchos de los valores importantes que antes se defendían. Aunque también es cierto que en otros aspectos hemos mejorado mucho. Debemos hacer un poco de auto-critica y empezar a ver el tronco en nuestro ojo y no la ramita en el ojo ajeno. Analicemos en profundidad la educación y la enseñanza.
Diferencias entre educación y enseñanza.
Para ser capaces de analizar el tema sin errores. Lo principal, es estar seguros de que conocemos y por supuesto, entendemos el significado y en que consiste cada uno de los conceptos que estamos analizando. Para ello, vamos a definir y dar una breve explicación sobre cada uno de ellos:
- Educación: Conocemos por educación, a todas las actividades que realizamos para conseguir potenciar y mejorar la capacidad intelectual, ética y emocional de los niños.
- Enseñanza: Es lo que conocemos como trasmitir las experiencias, los conocimientos, las habilidades…
Según estas definiciones, podemos decir que en muchos casos están entrelazadas la enseñanza y la educación. Por ejemplo, a la hora de mejorar la capacidad intelectual. Tenemos que darnos cuenta de una cosa muy importante, las dos actividades, son complementarias y necesarias. La educación necesita de la enseñanza y la enseñanza necesita de la educación. No quiere decir que un niño que no sepa leer, no pueda ser un niño muy educado. Pero, si que para ser educado, necesita una serie de enseñanzas.
Lo dividimos.
Hace no mucho veía una foto viral del facebook. Donde se reclamaba, “El profesor enseña y el padre educa”. Y es una tendencia que se está poniendo de moda. Pero, es más que nada por la situación que estamos viviendo. En seguida hablaremos de ello. Pero antes me gustaría decir que todo el ambiente del niño, incluso los compañeros, van a tener parte de responsabilidad de la educación del niño. Ya que la educación, no es solo lo que le dicen los padres. Sino, lo que ve en la tele, lo que escucha en el colegio, lo que hacen sus abuelos, sus amigos… Es evidente, que el que mayor peso tendrá será el que más tiempo pase con el niño. Y además, los padres tienen una ventaja. Los niños siempre dan mayor peso a los padres. Al igual la enseñanza, no solo se da en el colegio, un ejemplo, es si vamos al campo con el niño. Podemos enseñarle en una tarde, muchas más cosas de las que va a aprender escuchando al profesor.
La lucha entre los padres y el colegio.
Tanto a los padres como a los profesores, nos gusta hacer una cosa. Buscar culpables. No se como sería antes, ya que tan solo tengo 30 y alguno (dejemoslo ahí). Pero, creo que podría contar con los dedos de la mano, las veces que he escuchado a alguien asumir la culpa por algo relacionado con la educación de los niños. No nos damos cuenta, pero hasta en ese
momento estamos enseñando a nuestros hijos sobre educación. Y lo que nos cuesta asumir las culpas. ¡No es malo equivocarse! De hecho, si nos damos cuenta de que nos hemos equivocado, podremos corregirlo y solucionarlo. Si echamos balones fuera, el que va a salir perjudicado es el niño.Seguro que has oído en muchas ocasiones las siguientes expresiones:
- Los padres les permiten todo.
- Los padres se ponen de lado de los niños.
- Los padres le quitan la autoridad a los profesores.
- Los profesores solo van a leer la lección.
- A los profesores no les interesa lo que hacen.
Y podemos seguir. Pero creo que con esas ya nos hacemos una idea. Primero decir que no todos los padres son iguales, ni que todos los profesores son iguales. Solemos generalizarlo todo. Y lo único que hacemos es dar una explicación errónea a un problema muy grave. Lo que está claro, es que tanto la educación, como el conocimiento, ha ido disminuyendo con los años. La cuestión no es buscar culpables. Sino cambiar el método. Y por supuesto asumir nuestra parte de culpa. Ya que todos tenemos nuestra responsabilidad.
La educación en el tiempo.
Aunque no lo hayamos vivido, sabemos que los niños de antes eran más educados. Aunque es un poco extraño definirlo así. Ya que en tema de educación, creo que habría que fijarse mucho más en la calidad que en la cantidad. Recuerdo de pequeño a mi madre, repetirme una y otra vez, “Si no quieres estudiar no estudies. Pero, que nunca me tenga que llamar tu profesor por mal comportamiento.”
Antes el respeto a los mayores era una máxima. Hicieran lo que hicieran, los más jóvenes, deberían respetar a los más mayores. Algo que a mi tampoco me parece normal. Creo que el respeto debe ser independiente de la edad. ¿Por qué un anciano va a merecer más respeto que un chico de 20 años? Lo mismo el chico de 20 años, es la persona más buena del mundo y el anciano ha sido un mal bicho toda su vida y lo sigue siendo. A cuantos jóvenes se les ha colado una persona mayor en el supermercado de muy malas formas y encima intentando justificarlo. No creo en el insulto, pero desde luego no creo que por ser mayor, tenga que tener esas consideraciones.
Una de los cambios de la educación en una sociedad, depende de la que ha tenido cada uno. Así por ejemplo, las personas de unos 60 años (nuestros padres) han sido educados de una forma muy estricta. Sin muchos lujos, con ganas de tener más. Pero, además, ellos tenian a sus madres en casa. Y era mucho más fácil que hubiera un contacto y una supervisión del comportamiento del niño.
Con el tiempo, esos padres con los que han sido tan estrictos. Se han convertido en padres. Y quieren para sus hijos más libertad, justo lo que ellos no han tenido. Aunque el problema
Conclusión, la educación se diversifica en diferentes personas. La calidad pierde. Y los referentes que tenemos de siempre. Ahora no nos valen para nada.es que lo juntamos con una sociedad totalmente diferente a la de entonces. Desde luego el consumismo que podía haber entonces no tiene nada que ver con el que existe hoy. Con lo cual lo que nuestros padres deseaban, unas zapatillas nuevas (ni de marca), o una bicicleta… Ahora se ha convertido en que lo que quieren es todos los juguetes del mundo, la ropa de marca y más cara… Y encima no nos olvidemos que ahora la mayor parte de las madres trabajan fuera de casa. Y los horarios de los padres no es muy compatibles con los de los niños. Con lo que tenemos que delegar una parte muy importante de la educación. Y por supuesto, si solo les vemos unas horas al día y los fines de semana. Lo que menos nos apetece en ese momento es ponernos a discutir para que coma, o por no comprarle una peonza por que ya tiene una.
Las nuevas influencias de la educación.
Cuando hablamos de educación, solemos centrarnos en dos puntos básicos. Los padres y los abuelos. Y nos olvidamos de todo lo que nos rodea, el ambiente, amistades…
Hace un par de semanas escribía un artículo, sobre la la influencia de la television en la educación de los niños. Cuando nosotros eramos niños, veíamos la tele, eso nadie lo discute. Pero, te invito a que hagas un día de visionado de tus programas infantiles
favoritos. Y después, hagas un repaso por los contenidos de los programas que ven los niños de hoy en día. Y no solo los contenidos. Frente a una hora de media que veían los niños la tele en los ochenta al día. Hoy nos encontramos que los niños pasan 4 horas. Y a esas horas hay que sumar Internet, consolas… Aunque nos parezca una locura, no es tan raro pensar que la televisión y las nuevas tecnologías tienen mucho que decir de la educación de los niños de hoy en día.
Es cierto que la responsabilidad es de los padres, que vean tanta tele. Pero, no nos olvidemos de la situación de la mayoría de los padres. Saturados por el trabajo, agobiados, que no son capaces de llevar su propia vida. Como para conseguir que los niños dejen de ver la tele. En ese caso, la vida se convierte en una lucha constante. Algo que nadie quiere y confiamos en que no les hará tanto mal.
La enseñanza y el tiempo.
Es curioso, ya que en la enseñanza no ha habido tantos cambios como pensamos. Aunque queda muy lejos el slogan “la letra con sangre entra”. Seguimos utilizando prácticamente los mismos libros que hace 50 años. Con algunos cambios (solo para sacar nuevas ediciones y que los padres tengan que pagar más) pero, si tienes algún libro de matemáticas, geografía, filosofía, lengua… de tus padres y los comparas con los tuyos y con los de tus hijos. Te aseguro que te vas a llevar más que una sorpresa. Al fin y al cabo, tenemos una educación basada en la memorización frente a la participación.
El modelo de enseñanza, está más que obsoleto. Y todo el mundo lo sabe. Todos hemos estudiado los ríos, los países, la gramática, el inglés… Y creo que no conozco a nadie que sepa decirme todos los ríos de España, ni que no cometa faltas de ortografía, ni que hable un buen inglés…
Y le echamos la culpa a los profesores. Los profesores se centran en un método impuesto y a pocos se les deja innovar. Muchos niños de 5 años…, pasan en el colegio incluso más horas que los padres en el trabajo. Desde luego eso no es normal. ¿Cómo va a aprender? Encima nos quejamos por que no presta atención. Habría que ver si ponen a gente de 40 años a asistir al colegio como a los niños. Cuantos prestaban atención. Y estoy seguro que todos, quitando alguna asignatura o punto. No sabrían lo que están explicando. A pesar de haberlo estudiado con “otro sistema educativo”.
Conclusión.
Para mejorar y cambiar las cosas debemos saber donde está el origen del problema. Pero, en el caso de la educación y de la enseñanza. Es obvio que el problema no es uno. Que viene de muy profundo. Y es muy complejo de solucionar. Para ello, lo primero que debemos hacer es cambiar nosotros. Ver en que fallamos y como podemos mejorar nuestra parte. Intentar reducir la tele, pasar más tiempo de calidad con los niños. Intentar enseñarles lo que es la vida y la poca importancia que tiene el dinero. A la vez de saber lo difícil que resulta ganarlo. Hay que darle valor a las cosas. Creo que no digo nada nuevo, cuando digo que el que tiene todo, no le da valor a nada. La felicidad no es tener. Es disfrutar de la vida.
Aun así, soy consciente que la sociedad no va a cambiar, por lo menos a corto plazo. Con lo cual las siguientes generaciones, serán de niños con padres ausentes (no por su voluntad). Criados por los medios con programas como los niños que cantan, los que son cocineros, en breve seguro que llegan los concursos de belleza tan típicos de EEUU. Y veremos en que se convierte el mundo cuando ellos sean los que tienen que enderezarlo todo.
Intenta aportar tu pequeño grano de arena a esta sociedad, criando niños con fuertes valores como la empatía, la solidaridad, el respeto hacia los demás (no solo hacia los mayores) y algo muy importante que sepan comportarse en función de donde esten. hay momentos en que debemos volvernos locos y actuar como tal, pero incluso los adultos. Pero, hay otros momentos en que debemos comportarnos y ser lo más politicamente correctos.