El último día de la 10º Muestra SyFy comenzó con dos clásicos gracias al Phenomena: Alien y Desafío total. Después de la revisión, le tocaba el turno a Cockneys vs Zombies, en la que dos hermanos se embarcan en un atraco a un banco con unos singulares cómplices y resulta que les toca en medio de una expansión zombie. Por si fuera poco, además de salvarse ellos, tendrán que echar una manita a la residencia de su abuelo, la que pretendían salvar con el dinero del banco, para que una panda de ancianos salgan vivos de allí.
Lo mejor sin duda de esta comedia británica es ver a los octogenarios empuñando armas como si fuera lo más habitual y normal del mundo, encabezados por Alan Ford y Honor Blackman.
Si bien es cierto que todos los personajes están muy claros y no hay evolución en ninguno de ellos, se agradece que tampoco haya demasiada piedad con algunos de ellos, así como algunas muertes de zombies o momentos hilarantes protagonizados por tanto absurdo que rodea a este grupo tan variopinto.
No aporta nada al género zombie -¿qué película lo hace hoy en día?- pero entretiene y cumple su función con ese humor británico que hay que saber entender para que te hagan gracia determinados chistes. No llega a ser la bizarrada de Dead sushi, pero desde luego la cinta es carne de festival.
Para rematar el festival, El último exorcismo 2, que se sitúa tres meses después de la primera y que realmente tampoco llegará a aportar nada nuevo al género y a las películas de exorcismo. Puede que tenga hasta un punto de sinsentido.
De aquí, a la próxima muestra a ver qué sorpresas nos traerá el año que viene.