En diciembre, además del frío, llegan las temibles navidades, las cenas con amigos y compañeros de trabajo en las que cebarse... y los productos de temporada. En el caso de las verduras, son cositas que nos ayudarán a equilibrar nuestra dieta entre comilona y comilona. La naturaleza nos ofrece durante el mes de diciembre, por poner una pocas, las alcachofas, el brócoli, las endivias, la lombarda y otras coles, así como frutos secos.
Si las cenas las hacemos nosotros mismos en casa, lo cual vendrá estupendamente para el bolsillo, también podemos contar con algunos platillos de picoteo. Para empezar algo de picoteo, sencillo, típico de los bares de hace tiempo:
Corazones de alcachofas con anchoas
Las endivias son frescas y crujientes, a veces un tanto amargas. Su forma es firme, podemos usarlas de barquitas para acompañar una crema de queso azul o roquefort y, ¿por qué no? ¡nueces!
Endivias con salsa de queso azul
Personalmente la lombarda, las coles y los repollos no me gustan en absoluto... quizá sea su olor o su presentación habitual, que no me han llamado la atención en la vida. Sin embargo, creo que podría hacer una excepción si me la presentan en un formato más atractivo, aprovechando ese color tan maravilloso y navideño y, por supuesto, que no falte el queso, que lo mejora todo. Además, si tenéis niños en casa, podéis aprovechar el caldo de cocer las lombardas para hacer experimentos revestidos de magia y vayan aprendiendo de ese laboratorio que es la cocina.
Tartaletas de col lombarda con queso de cabra
El brócoli, esos cerebros verdes, está cargado de vitaminas. Personalmente me gusta darles un toque salado y picantón con esta salsa de soja y wasabi. Por cierto, es un plato que se puede tomar frío sin problemas para acompañar la tartera que llevamos para comer fuera de casa.Brócoli con salsa de wasabi
Otro de los productos de temporada es el marisco, cuyos precios según se acerca la navidad se vuelven prohibitivos... ¡pero siempre nos quedarán los congelados! Yo os presento mi plato favorito para las navidades. Olvidad las gambas, los langostinos o las cigalas con esa cáscara tan dura y conoced los carabineros. Son, sencillamente, lo mejor que se ha inventado. Una pasada por la plancha, sal gorda y a comerlos calentitos.
Carabineros a la plancha, así, sin más.
Y llegamos al postre... comprendo que empezáis a saturar a base de turrones, mazapanes y bombones, pero aprovechando la temporada de nueces no podía dejar pasar esta oportunidad. Unas obleas de pasta filo (u hojaldre), las nueces machacadas, un dulce sirope en el que no falte la miel (y el agua de azahar, mmmm...) y tenéis unos deliciosos, nutritivos y exóticos baklava hechos en casa. Un orgullo del que presumir, vamos.
Baklava de nueces
¡Que aproveche!