No pudo ser.
Guardiola guarda un respetuoso silencio.
La primera jugada del partido, cuando el Barcelona sacó del medio y fue hacia atrás dejándosela a Piqué, fue una llegada del Real Madrid. Piqué dejó pasar la pelota para Pinto que nunca pensó en lo que iba a hacer Piqué y no fue a buscarla, el pase iba demasiado débil, la pelota quedó a mitad de camino, y llegó Higuaín que casi convierte. El Real Madrid fue con todo a buscar y tuvo a los 2' otra ocasión clara de gol en un centro que llegó al segundo palo donde Higuaín no pudo darle dirección al cabezazo.
Casillas se la queda.
Y respondió el Barcelona con dos pelotas filtradas que no pudieron resolver primero Messi, fauleado por el defensor, y luego Aléxis Sánchez que se iba de cara a Casillas. Pero las cosas no terminaron ahí. El Real Madrid siguió proponiendo, presionando bien arriba, provocando el error del Barcelona que no demoró en llegar por intermedio de Pinto que hace un regate buenísimo dentro del área chica para sacarse de encima la presión de Higuaín, y luego se equivoca en el pase, la jugada no fue aprovechada por los atacantes del Madrid. Después Özil enhanchó para la zurda y le pegó desde lejos un bombazo que dio en travesaño. Así siguió todo el primer tiempo, para un lado y para el otro hasta que sobre los 35', debido al cansancio del Madrid, el Barcelona se adueñó del partido y tuvo ocasiones claras para convertir.Jugada en la que Iniesta se lesiona.
Recién lo hizo a los 42' cuando Messi perseguido por dos rivales deja pagando a Pepe con un pase magistral a Pedro, quien había entrado por Iniesta (Salió lesionado después de haber jugado unos excelentes 30' minutos) que definió cruzado ante la mirada de Casillas que nada pudo hacer. Otra vez lo mismo, ante la superioridad impuesta por el Barcelona, empezó el juego brusco del Madrid, patada va, patada viene, protesta por acá, persecusiones al árbitro por allá, el partido se desmadró, y empezó a regir la ley del más fuerte donde Puyol surgió con toda su mística para responder a la prepotencia de los madridistas.Paren de algún modo a Messi.
Los jugadores de Barcelona provocaron una extensísima discusión sobre el final del primer tiempo exigiendo una tarjeta amarilla a Diarra por falta sobre Messi. Y cuando vino el tiro libre de esa misma jugada, Alves hizo lo mejor que sabe hacer el Barcelona y que no debió perder nunca: Jugar y juhar. Le quedó a Alves en el vértice derecho del área, le pegó cruzado y fortísimo a una pelota que entró en el ángulo para terminar en gol pese a la estirada de Casillas. Ahí nomás terminó el primer tiempo, con la alegría catalana, y la ilusión de los madridistas por el suelo.El segundo tiempo empezó con un concierto del Barcelona. Toque y movilidad, pases corto, triangulación recta para evitar la presión del Real Madrid, tocando de primera, habilitando a quien apareciera por el lado contrario al de la tenencia, la maravilla futbolística de los catalanes se había puesto en marcha.
Golazo de Alves.
Sin embargo, un tiro libre aislado para el Real Madrid desde la izquierda terminó en gol de cabeza de Ramos. Anuló la jugada el ´árbitro por empujón del defensor. Y mientras el Barcelona seguía tocando y moviéndose en el campo con toda alegría, recupera el Madrid, saca rápido para Özil que le da un pase perfecto a Cristiano Ronaldo en la segunda aparición del portugués por derecha, quien define con excelencia y se lleva la pelota hasta el medio para no dar un minuto de respiro al Barcelona. Apenas cuatro minutos después, Benzema hace sombrero impecablñe en el área donde deja tendido a Puyol, y define ante la salida de Pinto. La remontada se estaba repitiendo, los últimos partidos del Madrid por la liga que había remontada hac´pian un eco molesto en el oído de los catalanes que, no obstante, continuaban alentando, y molestando a Pepe con silbidos e insultos.A Pepe también le duele.
El Real Madrid se fue con todo a la carga, y pudo haber convertido en jugadas mal resueltas por los atacantes. Poco hizo el Barcelona a partir del segundo gol del Madrid, Aléxis sintió todo el rigor de la fuerza de Pepe y de Coentrao, y Pinto salvó a los catalanes en varias oportunidades. Llegó sólo tres veces con peligro más un tiro libre de Messi que casi se mete en el ángulo de Casillas. Y como se im ponía la fuerza, adentro Mascherano para no dar ninguna ventaja.Sobre el final se repartieron tarjetas para tener de recuerdo, entre las que se cuenta una expulsión a Ramos y varias amarillas. Partidazo en el Nou Camp.
Anulado a Ramos.
No persigan a ese hombre que no lleva caramelos.
¿Penal de Busquets?
Travesaño de Özil, Pinto mira.
Preocupación total en el primer tiempo.
En patota a discutir.
Ojálá no sea nada.
Con el sudor del trabajo realizado.