Revista Arte

Algunas consideraciones entorno al foro ARCOBloggers

Por Camilayelarte @camilayelarte
ARCOBloggers empezó hace casi tres meses con  una experiencia de edición online abierta, que de momento sigue activa. Con motivo de la celebración de ARCO, tuvieron lugar dos mesas redondas donde cada blogger participante presentó sus líneas de trabajo en la red. Un poco para ordenar las ideas que allí se expusieron he querido volver sobre algunos de los temas que tratamos, debido a que trabajamos en un medio digital considero sería  interesante que las cuestiones que se plantearon en las mesas redondassiguieran generando debate en el medio que las hace posible.

Algunas consideraciones entorno al foro ARCOBloggers

Foro ARCOBloggers. Foto: Pilar DM


Si bien hubo ponencias muy distintas entre sí que no sólo se limitaban al perfil de blogger, como las de Evan Roth, Jason DaPonte o Michael Spalter, me voy a centrar en analizar las que se relacionan directa o indirectamente con el ámbito de los bloggers. Indirectamente como el caso de Allegra Burnette cuya ponencia respondió a la pregunta sobre ¿qué puede hacer un blog y las redes sociales en el plan de comunicación de un museo? Burnette, que no bloguea personalmente pero facilita que otros lo hagan, nos mostró el uso del blog institucional a través de la estrategia de comunicación que el MoMA lanza desde su página web. Se trata de un sistema abierto que multiplica las voces del museo, voces que aquí demasiado a menudo se limitan a la lejana voz en off de la institución o con mucha suerte a la algo más humanizada figura del comisario. En el MoMA la red sirve para generar un ir y volver de voces, de  aquellas que están dentro del museo porque trabajan en él, de los que se encuentran fuera o vienen para verlo y se van. Algunas estrategias rozan el reality show como lo de Marina Abramovic pero a pesar de ello se desprende que efectivamente existe un público que se relaciona con el museo aunque sea a través de comentarios que se producen en las redes sociales pero que nacen por el contenido y las herramientas de la propia página web.
Del uso institucional del blog pasamos al uso personal del blog. En las dos sesiones de ARCOBloggers me pareció distinguir dos tipologías de bloggers, por un lado aquellos que crean contenido en la red sin estar sujetos a las redes sociales y al posicionamiento en Google, y por el otro los que las utilizan como estrategia de visibilidad y proyección. A la primera tipología responden Rui Guerra, Juan Martín Prada y Valentina Tanni, mientras a la segunda categoría pertenecemos Pilar DM, Montaña Hurtado, Nicola Mariani y yo misma. Rui Guerra habló del lector ilustrado al que él se dirigía, una microaudiencia que prescinde de la inmediatez y del narcisismo propio de las redes sociales, la complicidad de un lector que busca algo que vaya más allá de lo inmediato.En esta misma línea se sitúa Juan Martín Prada, quien introdujo un tema que me parece fundamental y al que yo también quise hacer mención desde otra posición, el del tiempo. Prada comentó que el contenido generado en la red no tiene una vida limitada a esa misma inmediatez de la que huye Rui Guerra, que en mi caso sería el tweet al que me siento condicionada, sino que el efecto que un post puede tener tal vez llega años más tarde, en forma de artículo o de tesis doctoral. Así, es necesario comprender que el saber y el conocimiento tienen una vida completamente distinta a la exigida por las redes sociales, esa sujeción al aquí y al ahora, a que tu noticia ya no tenga vigencia y por lo tanto nadie la vaya a retweetear, a no ser trending topic demuestra que los bloggers creamos contenido como destellos. La intervención de Martín Prada me hizo pensar también en cuán distinta se impartirá, la asignatura de “Fuentes para la historia del arte”. ¿Serán los blogs fuentes para la historia? Naturalmente, será fuente aquello que ofrezca un contenido relevante, ya sea en medio digital o analógico.  
La visibilidad que te ofrecen las redes sociales no son sinónimo de la calidad del contenido del blog, esa era mi reflexión. Roberta Bosco apuntó un tema que para mi es importante, el de la credibilidad del blogger, que creo está relacionada con mi afirmación sobre las redes sociales. Mi principal temor, algo que me lleva a cuestionar constantemente el blog, es confundir visibilidad con credibilidad. La credibilidad se construye poco a poco y trabajando, pero las redes sociales construyen la credibilidad por numero de Followers y Me gustas. Un nuevo follower no es sinónimo a que se lean el contenido de tu blog. Sabemos que leer en una pantalla no es como leer sobre papel, y que la lectura en la red es transversal y superficial, así que el número de visitas en el blog generadas gracias a Twitter y Facebook son muy relativas. Es cierto que tampoco el número de periódicos vendidos es sinónimo para un periodista a número de lectores de su artículo, pero al periodista que trabaja para un diario la credibilidad se la da de el medio para el que trabaja, mientras el blogger -a ojos de la crítica establecida y no de sus followers-, es precisamente el medio utilizado, una plataforma de autoedición online, el que se la quita. Dije durante mi intervención que esa credibilidad y calidad del contenido debe entenderse como un camino a largo plazo, tal y como apuntaba Martín Prada con relación al tiempo y tal vez aspirando a ese lector ilustrado al que Rui Guerra hizo mención. Por generación y forma de entender la comunicación, considero que la función del blog es la de buscar nuevos lectores/públicos que se mueven en terrenos como las redes sociales y que efectivamente tienen interés o podrían sentir curiosidad hacia el arte pero se aburren profundamente cuando los medios tradicionales hablan de ello. 
Las dos principales aportaciones del público que asistió al foro, hacen hincapié en dos cuestiones que transitan entre lo que he expuesto hasta ahora, las de Pimienta_Sánchez y Paco Barragán. Ambos apuntaron a dos cuestiones que se relacionan con los temas que se expusieron en las mesas. La primera reclamando formatos más participativos, que fueran más allá de la mera presentación, más voces en lugar de una única voz (la de la institución/ponente). Creo que esa pluralidad en cierto sentido ya se dio puesto que el debate mientras el ponente hablaba se trasladaba a los comentarios que el público hacia en Twitter, creando un doble flujo de información y recepción de lo que ocurría en el foro. A nivel logístico la participación debe planificarse, tal vez se puedan buscar nuevas fórmulas, yo no las tengo, pero como dijo Roberta Bosco tampoco podemos convertir un foro en un Sálvame versión ARCOBloggers. El que tenga ideas que las ofrezca.La otra cuestión a debate la introdujo Paco Barragán señalando la ausencia de verdadera crítica entre los medios que hablan de arte, ya sean digitales, analógicos, especializados o bloguerizados. Falta de verdadera crítica debido a un sistema de amiguismo y tráfico de influencias completamente asumido en el sector, que Barragán considera corregido y aumentado entre los bloggers y el uso del social media. El uso de las redes sociales comporta efectivamente la construcción del sentimiento de pertenencia a una comunidad, como apuntó Nicola Mariani, la estrategia del #FF es un claro ejemplo: recomiendas seguir a los tuyos. Si bien no secundo del todo la crítica al amiguismo de Barragán, al fin y al cabo las reglas del juego de las redes sociales son ésas, sí estoy de acuerdo con la percepción y el peligro de que éstas sean reflejo de una forma de hacer crítica soft, una transposición de la delicadeza de opiniones que se da en los medios tradicionales con el añadido del amiguismo puesto en práctica gracias a las redes sociales. Antes de hacer crítica hace falta ser autocrítico, de ahí el compromiso y la rigurosidad que personalmente quise remarcar como categoría fundamental para que el contenido creado en la red sea de calidad. 
Os dejamos el vídeo de mi ponencia en ARCOBloggers:


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