El corredor Igor Antón, hasta ahora en el equipo Euskaltel-Euskadi, ha fichado por el Movistar para esta nueva campaña, y reconoce que aún no se ha acostumbrado a estar con esos colores. Llega en plena madurez deportiva, con 30 años, aunque con un cambio de rol, el cual ha asumido con toda naturalidad.
Comienza una nueva temporada para Igor, pero reconoce que tiene muchas ganas e ilusión. Del Movistar comenta que es un equipo "muy profesional y significa dar un salto más porque hablamos de un equipo que ha ganado la clasificación WorldTour. Y me va a venir bien que sea tan cercano, con tantos conocidos. Yo creo que tiene muy buenos ingredientes para mí".
Su fichaje fue muy rápido. Él mismo lo cuenta. "Firmé un martes y me uní al equipo un miércoles. De un día para otro tuve que hacer la maleta. Hacerme la primera foto y verme con otro color fue muy extraño, sobre todo cuando me miré en el espejo, pero creo que me sienta bien". También tendrá cambio de material con Canyon y Campagnolo. "Tengo mucho cambio en ese sentido porque cambia todo de arriba y abajo. Tendré que tener paciencia en ese sentido, ahora hay que adaptarse" comenta Igor.
Aún no ha definido su calendario, pero el Giro de Italia está en el horizonte. "Soy el último que ha entrado y ha sido todo muy rápido. El programa va enfocado seguramente al Giro de Italia en mayo: empezaré en Mallorca, antes será la presentación y una concentración, y el Tour Haut Var, luego están Volta Catalunya y País Vasco y las clásicas de las Ardenas, aunque puede haber cambios. El objetivo es llegar a abril-mayo bien y espero dejar buen sabor de boca".
Igor Antón sabe que la temporada es larga y habrá momentos para dejarse ver. "Siempre hay oportunidades que aparecen y hay que aprovecharlas. Se trabaja para unos líderes muy sólidos, luego siempre queda la puerta abierta para el lucimiento personal como este año, que han ganado 12 corredores diferentes", comenta el nuevo fichaje del Movistar.