Algo pasó. Abejas muertas, esta semana, sobre la ruta que une Villa Dolores con La Paz, al sur del Valle de Traslasierra. (gentileza gabriel Escobar)
Enorme pérdida
“Tengo 62 años, soy apicultor de toda la vida en esta zona, y jamás vi una mortandad tan grande y repentina; se debe haber usado un veneno muy potente para matar de este modo, nos llama la atención porque fue muy de golpe”, planteó Alfredo Montenegro, productor del paraje Loma Bola, quien perdió más de 200 colmenas completas y unos 170 núcleos a punto de ser vendidos.“Para colmo, justo estamos en el final de temporada, que es cuando se entregan las reinas en los ‘nucleros’, y ahora los hemos perdido: El daño sufrido es muy grande”, destacó el productor.“La mortandad comenzó el sábado 10 de marzo, esperamos unos días por si se trataba de una fumigación pasajera, pero el problema siguió y fuimos descubriendo, de a poco, más colmenas dañadas. Hasta ahora, cambiamos más de 1.200 casi totalmente perdidas”, apuntó Gabriel Escobar, quien tiene sus apiarios en jurisdicción de la comuna de La Paz. Los apicultores reclaman una respuesta razonable para el problema.A Traslasierra, donde aún predomina el monte nativo, llegaron en las últimas décadas muchos apicultores que dejaron de producir en regiones de la pampa húmeda, donde la expansión agrícola complicó la actividad ligada a la miel. Similar éxodo se observó hacia zonas del norte provincial.“Justamente nosotros destacamos que la calidad de la miel de esta región se relaciona con que estaba libre de agroquímicos, porque es puro monte”, apuntó Gonzalo Cervi, integrante de la Asociación de Apicultores de Traslasierra y el Conlara.“Hay dos estancias con cultivos, pero están lejos, solamente una fumigación muy desordenada puede afectar de este modo. Hay vecinos que vieron avionetas en la zona del daño”, apuntó Escobar, tras reclamar que se identifique el origen del problema que por primera vez registran.
Apicultores, de mudanza