Se me ocurrió hacer un postre que comía yo de pequeña, siempre comprado de la pastelería, no recuerdo que mi madre lo preparase. Es un postre que no necesita muchas cosas pero es bastante laborioso ,eso si , mi niño se lo ha pasado bomba en la cocina. - 7 claras de huevo Preparación: En una bandeja de horno se coloca papel de horno y se pone la mezcla como si fueron pequeños buñuelos, tener en cuenta de que van a crecer en el horno, no los pongáis muy juntos y tampoco los hagáis muy grandes. Se dejan a fuego lento, yo los puse a 100 grados, pero varía de horno a horno, unos 30 minutos, también el tiempo es relativo, pero no se tienen que dorar mucho. La crema es invención mía, la he hecho un poco de lo que tenía yo en casa en ese momento, pero se pude utilizar cualquier crema que os guste siempre y cuando sea una crema bastante espesa: se pone a fuego lento la mantequilla y el chocolate, una vez templado se añade a la crema pastelera junto con la nata. Se cogen de dos en dos los bezele, y se rellenan con la crema, se guardan en un sitio que no haga mucho calor pero que tampoco tenga humedad porque se van a poner blandos, a mi me ha pasado, eso no significa que van a ser menos ricos, lo único que no van a tener el mismo aspecto.
En todas las casas pasa a menudo que después de preparar un plato, sobren cosas de algunos ingredientes, pues en casa el dia 31 después de hacer una tarta para tener esa noche me han sobrado claras de huevo, nata montada y un poco de crema pastelera, y como en casa no se tira nada !!
Ingredientes:
- 300 gramos de azúcar
- 150 gramos de mantequilla
- 150 de chocolate para repostería
- 300 gramos de crema pastelera
- 200 gramos de nata montada
Se baten las claras de huevo con el azúcar bien hasta que estén bien duras, se pueden añadir nuez rallada a quién le guste la nuez, a mi me gusta pero yo no lo he hecho porque mi sobrina es alérgica a los frutos secos y no sabía si se iban a pasar por casa o no.