Billith y un pueblo de locos

Todos sabemos que el estreno de la nueva temporada de 'True Blood' marca el comienzo de la época estival (aunque se les adelanten las zorrupias) y, hasta que no suena "I wanna do bad things with you", nadie debería pisar la arena de la playa. Pero sois todos unos adelantados. La quinta temporada de una de las series estrella de la HBO fue bastante irregular y, a pesar de que tuvo sus aciertos (aunque nos duraron bien poco, "Hola Christopher Meloni"), marcó el comienzo de un movimiento: "Abandonemos Bon Temps". Sí, la gente (hablo de la comunidad tuitero-bloguerófila) decidió que ya bastaba de tanta tontería, de tanto anunciar una guerra que nunca llegaba y de marear la perdiz llenando el pueblo de seres sobrenaturales. Lo que comenzó siendo una serie de vampiros, ha pasado a tener brujos, brujas, hombres lobo, cambia formas y hadas. Una puta locura.
A partir de aquí, spoilers del 6x01.
Las season premiere de la serie suelen solían presentar las tramas de la temporada, engañando (o no) a la audiencia para seguir disfrutando de las locuras de los habitantes de Bon Temps. Pero este año ha continuado con la línea marcada por la pasada temporada y nos ha ofrecido una gran nada. O no, según se mire. Bill sigue jugando a ser el sucesor de Lillith (la del coño moreno), y, ahora fantásticamente bautizado por Pam como Billith, ha vuelto a su mansión para provocar temblores de tierra. Bueno, y para retomar su labor como creador de Jess y ejercer un poco de padre vampiro. Ah, y para ser triplemente poseído por Lillith. Por Lillith o por las encarnaciones de Lillith (yo he visto una Lillith negra y una blanca ¿sería asiática la tercera?). 

Por su parte, el equipo formado por Pam, Tara, Jessica, Sookie, Jason, Eric y Nora, después de esa visita a la playa ("Meados de pez y arena en tu chocho" en palabras de Pam) deciden separarse. Pam y Tara (seguimos jugando a que son "novias" aunque a Pam le guste más Eric que cambiar de outfit) vuelven al Fangtasia, donde son sorprendidas por unos SWAT con muy malas pulgas dispuestos a cerrar el garito (por orden del Gobernador/Senador/lo que sea de Luisiana). Burrell (el Gobernador en cuestión, que no es otro que el enigmático Kale Ingram de 'Rubicon') se ha convertido en abanderado de la causa "No más vampiros que no pagan impuestos" y está dispuesto a darle la vuelta a la situación. De momento, se ha sacado una fábrica de true blood de la manga. Jessica, convocada por Bill, ha vuelto a la mansión acompañada por Sookie, donde terminan reunidad con Billith y Eric y Nora, que llegan en el último momento dispuestos a eliminar al nuevo bicho. Pero de poco les sirve. Jess se queda junto a su creador; Sookie se encierra en su casa después de recuperar las escrituras y echar a Eric; y el propio Eric y su hermana se van a buscar la forma de deshacerse de Bill.
¿Y Jason? Jason vuelve a Bon Temps, pero por el camino se encuentra a un amable caballero que le acerca al pueblo. Jason, que destaca por sus pocas luces, le cuenta toda su historia y termina descubriendo su identidad: es Warlow, el vampiro que mató a sus padres y que va a cobrarse a Sookie para cumplir el pacto que firmó con su padre hace mucho tiempo. Mientras, Sam carga con la hija de Luna después de ver cómo ésta perdía a su madre. Y como había que meter en la trama a Lafayette para demostrar que sigue vivo, se lo encuentra en los Merlotte's dándole al tequila y "guardando el fuerte". Alcide (¿le importaría a alguien su trama de no ser por Joe Manganiello?) ejerce de líder de la manda (al más puro estilo Girls Aloud en 'Something New') y se ve envuelto en un triángulo amoroso que le va a traer tantas alegrías como desgracias ("Soy tu puta número uno"). Y Andy, Terry y Arlene (¿os imagináis un cruce entre Arlene y Elsbeth Tascioni?) han visto cómo, lo que eran unos simples bebés, han pasado a convertirse en unas niñas a las que ya no hay que cambiarles los pañales. Y todo en a penas unas horas.

'True Blood' es una locura que hay que ver con los ojos del "compro todo lo que me eches". Nos empeñamos en querer pedirle algo más cuando hace ya unas temporadas que no nos lo da. Pero bueno, yo sigo disfrutando de esta locura.