Blanco nocturno (Ricardo Piglia)

"Tony Durán era un aventurero y un jugador profesional y vio la oportunidad de ganar la apuesta máxima cuando tropezó con las hermanas Belladona."
Mi argentino favorito se llama Ricardo Piglia y le encanta escribir novelas en las que la narración literaria se mezcla con la crónica periodística. En esta ocasión se ha llevado a Renzi a un pueblo de la Pampa, en busca de información para su periódico sobre la muerte de un puertorriqueño estadounidense que apareció por allí del brazo de unas gemelas nativas.
Decir muerte puede significar que “Blanco Nocturno” es una novela negra. Lo es, pero tal vez sólo a medias. Hay un detective, hay sospechosos, hay unos hechos que se reconstruyen a lo largo de la historia… Pero lo que verdaderamente retrata es la micro realidad de los miembros de un aldea cercana a Buenos Aires, que me da a mí que algo tiene de Faulkner y su Jefferson, aunque con menos páginas.
Pues aquí os dejo mi primera lectura del año, que también espero que signifique el arranque de un año lleno de buenas historias.