Hace mucho que hago estas bolitas pero nunca había decidido publicarlas porque siempre me salen muy feas en las fotos. Pero hablando con una de mis cuñadas se extrañó que las hiciera con la máquina de cakeballs, así que aquí las pongo. En la cocina de lo que se trata es de dar ideas, así que publico estas bolitas de espinacas aunque sean feas, que es la única forma que consigo de que mi hijo coma algo con color verde, o son bolitas o nada!! Es un ball-adicto!! No os quiero ni contar lo que hace con las de bizcocho de chocolate, o con las de huevo y calabacín,...
Si no tenéis la máquina, o la que tenéis solo hace cupcakes, no os preocupéis!! La hacéis con forma de cupcake o hacéis bolitas sobre un papel encerado y al horno hasta que doren un poquito!! Así las hacía yo hasta que los reyes me trajeron mi maquinita. Todo tiene remedio... Con una cuchara todas os saldrán del mismo tamaño.
Ingredientes:
600 gr. de espinacas frescas limpias
100 gr. de queso parmesano rallado
2 huevos
1 cebolla pequeña
1 diente de ajo
4 cucharadas de pan rallado (ir agregando cucharadas hasta que la masa sea un poco compacta, puede necesitar mas o menos)
sal y pimienta negra recién molida
Preparación:
Picar las espinacas, el ajo y las cebollas bien finitas. Echarlas en un bol con el resto de ingredientes y mezclar bien. Se salpimenta al gusto.
Engrasamos la máquina un poco y rellenamos los huecos con la mezcla todo lo que podamos. Cerramos la máquina y dejamos hacer unos 5-6 minutos. Las sacamos de la máquina con ayuda de un palillo para no quemarnos y repetimos hasta acabar con toda la mezcla. A comer!!
Y así quedan hechas en horno, un poquito mas aplastadas pero igual de buenas. Se hornean a 180ºC unos 12-15 minutos, hasta que se empiecen a dorar un poco.