Las boquillas son una pieza imprescindible a la hora de decorar o rellenar los cupcakes, de hecho, se suele decir que son los pinceles de los reposteros . Una comparación muy acertada puesto que existen una gran variedad de formas diferentes en sus extremos, las cuales determinan el diseño o decoración final al igual que los pinceles.
Aunque las boquillas se pueden clasificar en nueve grupos (según la punta que tengan y la decoración que realizan ) los materiales con los que se fabrican son solo dos: metal y plástico.¿ Cuáles debemos utilizar ? ¿cuáles nos permiten un acabado más profesional? Si dejamos a un lado los prejuicios medio ambientales y nos centramos en sus usos, la respuesta es ... ambas es lo ideal y ahora os cotilleamos porqué . Las boquillas de metal, aunque existe variedad de tamaños, suelen ser más pequeñas y delgadas que las de plástico y son la elección perfecta para conseguir detalles finos. Las boquillas de plástico por tanto, son en su generalidad más grandes y gruesas; ideales para rellenar o hacer grandes espirales en los cupcakes. NUESTRO CONSEJO: Tras usar las boquillas, lávalas enseguida con agua tibia y jabón. ¡Ojo! Hay que enjuagarlas super bien y dejarlas secar sobre un paño limpio o papel absorbente en lugar seco y caliente, si es posible. ¿Cuál es tu marca de boquillas preferida? ¿que tamaños son los que más usas? ¿de plástico o de metal? ¡ Click y encarga cupcakes para tu fiesta u evento en Vigo !