Cuando Bradley Cooper apareció en el radar de la cultura pop como el amigo entrañable de JJ Abrams, nadie podía adivinar que con el tiempo pasase de actor secundario a protagonista, de estrella taquillera a tener posibilidades de ganar un Oscar. Cooper, que está en conversaciones para protagonizar la próxima película de Cameron Crowe, aún sin título tendrá como compañera de reparto a Emma Stone.
Por el momento existe el siguiente argumento:
A sus 37 años de edad, un consultor de la industria armamentística llamado Brian Gilcrest ha caído en desgracia en EE.UU. y no le gusta a casi todo el mundo. Su único amigo es un aficionado a la tecnología llamado Jeremy. Como respuesta a una posible agresión de China, Gilcrest se instala en una base militar en Hawai para supervisar el lanzamiento de un satélite espía avanzado. Junto con el mayor sin sentido del humor Lisa Ng, debe asegurar las bendiciones del consejo nativo hawaiano antes del lanzamiento. Gilcrest también tiene la oportunidad de reunirse con Tracy, el único amor de su vida que se le escapó, junto con su esposo y dos hijos. Y es que en Hawai terminará por descubrirse a sí mismo.
Esa descripción provino de un informe de hace cuatro años, pero cuando este nuevo proyecto fue anunciado con Stone adjunta, el rumor fue que el guión había sido radicalmente rediseñado. Además, Crowe y Sony han tenido cuidado de no hacer referencia al proyecto como “Deep Tiki.”, el cual fue su título en un comienzo.
Por lo pronto vamos a oír más sobre la última película de Crowe, pero hay que quitarse el sombrero ante Cooper, quien aparecerá en Silver Linings Playbook (con un papel que huele a Oscar), seguido por la tercera parte de Resacón en Las Vegas, el próximo mes de mayo.