Revista Ajedrez
Entre los días 17 y 25 de enero pasados se realizó la 81ª edición del Campeonato Brasilero de ajedrez en la ciudad de João Pessoa, capital del estado de Paraíba, prueba organizada por la Confederación Brasilera de Ajedrez (CBX) y en la cual me desempeñé realizando tareas de difusión y asistencia técnica.El gran maestro Rafael Leitão fue el merecido triunfador de la justa, con 9½ puntos, fruto de ocho victorias y tres empates. La victoria del representante de Maranhão fue más cómoda que lo que pueda indicar la diferencia con sus perseguidores, dado que después de obtener serias diferencias en las primeras ruedas utilizó las últimas para administrar la ventaja y cerrar la prueba con dos tablas. Leitão mostró en este torneo su habitual fineza técnica, a la cual sumó en muchas partidas originalidad y fantasía. El gran maestro alcanza, con siete conquistas, a un histórico del ajedrez brasilero como João Souza Mendes (que además fue el primer campeón nacional, en 1927, obteniendo su séptimo título en 1958), al gran maestro Jaime Sunye Neto y a su contemporáneo, el también gran maestro Giovanni Vescovi, hasta aquí los máximos ganadores del campeonato brasilero.Completaron el podio los grandes maestros Felipe El Debs (9 puntos) y Krikor Mekhitarian (7½ puntos). El maestro fide Mateus Nakajo Mendonça, con 7 puntos, finalizó en la cuarta colocación y obtuvo su segunda norma de maestro internacional, mientras que el maestro fide Edgar Rodrigues, quinto en su debut en finales de campeonato nacional con 6 puntos debe ser considerado la revelación del torneo.Desde lo organizativo, uno de los destaques de la presente edición fue la transmisión en vivo de las partidas, con comentarios del gran maestro Darcy Lima y Juliana Rizo, iniciativa realizada por primera vez en la historia de los campeonatos nacionales y que tuvo la repercusión merecida. La dupla de comentaristas explicó online y en directo las características de las seis partidas de cada rueda en forma didáctica y precisa, con imágenes de los participantes y las posiciones; al finalizar las partidas algunos de los protagonistas acudían al estudio para comentar los entretelones de la lucha. La transmisión fue un verdadero lujo –por la calidad- y marca el inicio de una nueva etapa de crecimiento para el ajedrez brasilero.El torneo en sí fue muy disputado, con escasos empates en pocos movimientos y lucha hasta el último minuto; un ejemplo fue la partida entre Leitão y Mekhitarian, que a pesar de haber sido jugada cuando el primero ya era matemáticamente campeón –y muchos apostaban por una tablas de amigos- fue muy luchada y el resultado –empate finalmente- fruto de los acontecimientos del tablero.Se destacan dos factores fundamentales en la victoria de Leitão: su efectividad conduciendo las piezas negras –cinco triunfos y un empate- y el tratamiento impiedoso que aplicó, con las piezas blancas, a la tradicionalmente sólida Eslava, con tres victorias en otras tantas partidas. Una de ellas, de importancia deportiva para el resultado del torneo, fue publicada días atrás por AjedrezUruguay (Leitão – El Debs, de la rueda 7). Las otras dos fueron sobre el maestro fide Roberto Andrade y la que sigue, correspondiente a la rueda 2, sobre Mateus Nakajo Mendonça.Fuente: Ajedrez Uruguay