Son de origen libanés tres de las seis películas distinguidas por los jurados del séptimo Festival Internacional de Cine latino Árabe, que se realizó entre el 4 y el 13 de septiembre en Buenos Aires. Dos resultaron ganadoras de la competencia de largometrajes: Tramontane de Vatche Boulghourjian con el premio principal, y Those who remain de Eliane Raheb con la mención especial. La tercera –Submarine de Mounia Akl– participó de la competencia de cortos, y obtuvo la mención a la labor destacada en dirección de arte.
El galardón para Tramontane amplía el reconocimiento que esta coproducción con Francia obtuvo en Cannes y Dubai. En el ámbito porteño, crea expectativas en torno a una posible exhibición comercial.

En su ópera prima, Boulghourjian sigue de cerca a un joven cantante ciego desde el momento en que éste se entera de que porta un DNI falso, tanto como –descubre luego– el vínculo biológico con su familia. La búsqueda de la verdad es el motor de esta ficción que echa luz sobre el pasado reciente del Líbano, también marcado por la apropiación de menores y por cierta complicidad cívico-militar a la hora de ocultarles su historia.
De los otros nueve largometrajes en competencia, el documental Those who remain ganó la mención especial. Ésta es otra coproducción, pero con los Emiratos Árabes y dirigida por una mujer. Se trata de la semblanza de un campesino cristiano que lucha por su tierra en la región de Accar.
El premio al mejor corto en competencia fue para Kindil El Bahr del argelino Damien Ounouri. Por otra parte el jurado de esta categoría le acordó la mención especial a 5 dirhams par tête de las marroquíes Myriam Laalej y Paola Rima Melis, y otorgó dos menciones más: a la destacada labor en dirección de arte para la mencionada Submarine, y a la destacada labor en realización a Law of lamb para el tunesino Lotfi Achour. Este director también ganó el premio Cine Fértil a la Diversidad Cultural.