El Bulgur es uno de los ingredientes más usados en la cocina de Oriente Medio y África del Norte, siendo la base de guisos, cocido, o para ensaladas, normalmente remojado en agua. Bulgur en realidad es sinónimo de “trigo partido”, pero es una versión más elaborada, ya que se obtiene por cocción prolongada de los granos de trigo y su posterior secado.
Hay varios tipos de bulgur, según el tipo de trigo usado, uno más rojo y otro de color más amarillo, rubio. Según el grosor hay de grano fino o grueso. Una vez cocido el resultado es muy similar a la sémola de cous-cous.
Ingredientes:
Bulgur (250 grs.)
Agua(doble cantidad que de bulgur)
Pollo limpio de piel y huesos (500 grs.)
Especias para pinchitos morunos
Aceite de oliva virgen extra
Champiñones frescos
Sal
Salsa de soja
Intrucciones:
La noche anterior troceamos pequeñito el pollo y lo aderezamos con dos cucharadas de especias de pinchitos, sal y un chorrito de aceite. Mezclamos muy bien y reservamos en el frigo hasta el día siguiente.
Al otro día lavamos el bulgur y lo escurrimos bien.
Lo ponemos en una cazuela y lo cubrimos del agua.
Llevamos al fuego y, cuando empiece a hervir, lo bajamos al mínimo y lo dejamos cocer destapado durante 7 minutos.
Retiramos, refrescamos con agua fría , escurrimos bien y reservamos.
Ponemos un par de cucharadas de aceite en el fondo de una cazuela plana.
Salteamos el pollo hasta que se dore ligeramente.
A continuación añadimos los champiñones troceaditos.
Lo dejamos hacer y enseguida ponemos el bulgur reservado un chorro de salsa de soja y dejamos el conjunto durante cinco minutos.
Rectificamos de sal y servimos enseguida.
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