Revista Cocina
Os escribo desde el paraíso gaditano. Como siempre, las vacaciones se han hecho muy cortas, pero estamos aprovechando hasta el último segundo. Nos estamos alojando en un hotel de Algeciras (sí, Algeciras, ya lo sabemos) para poder movernos por los principales puntos de interés (Vejer, Gibraltar, Tarifa...) y la verdad es que el plan ha resultado todo un éxito.
¿Y sabéis cuál ha sido otro éxito? Hacerme con esta batita satinada de Hunkemöller. Me la he estado poniendo cada noche porque el aire acondicionado en el interior del hotel estaba fuerte y ha sido una de las mejores decisiones que he podido tomar. Si me preguntáis, merece mucho la pena la compra.
Hace un mes, Hunkemöller contactó conmigo para mandarme uno de sus productos. Personalmente, me encanta la marca por esa estética rosa cuqui (similar a Victoria's Secret, por si no conocéis la marca) y ya solo el hecho de recibir uno de esos paquetes rosas a rayas me hacía mogollón de ilusión. Finalmente, elegí esta batita porque necesitaba una.
En Hunkemoller tienen gran variedad de productos de deporte, baño, lencería... A mí me gustan bastante sus sujetadores - entre los que destacan el sujetador adhesivo y el sujetador sin tirantes - y toda la moda de noche (al habla una adicta a los pijamas). Y todo es muy femenino y bastante asequible. Podéis pedirlo online con total tranquilidad porque tarda muy poquito en llegar a casa. Y por el paquete, por supuesto 😅.
La batita es genial porque tiene una lazada interior y otra exterior. Entonces, si se desata por fuera, ¡no se abre! Y, además, TIENE BOLSILLOS. No hay nada más codiciado en la moda femenina que los bolsillos. La hay en varios colores y en la parte trasera tiene el lazo icónico de la marca.
Mi historia con las batas es curiosa. De pequeña las odiaba con toda mi alma y no entendía quién querría semejante prenda tan horrible. Hasta que, claro, crecí y me di cuenta de que no hay nada mejor que salir de la ducha, ponerte la bata y hacer tus cosas sin necesidad de pensar qué te tienes que poner.
En cuanto a las vacaciones, ya os contaré más adelante. Solo os comento que nos hospedamos en el Hotel Alborán Algeciras, que tiene servicio de habitaciones y un patio interior andaluz precioso en el que hemos cenado muy agradablemente.
Fotos hechas por Luxmantica Photos / Manuel Laya
Hotel: Alborán Algeciras