Revista Cine
LA CONCIENCIA VENGADORA (THE AVENGING CONSCIENCE, EU, 1914)Ahora vamos a Norteamérica para ver un nuevo acercamiento del maestro D.W. Griffith al maestro Edgar Allan Poe, es una mejora con respecto a la excesiva sencillez de "The Sealed Room" pero aun queda muy lejos de lograr el terror, el suspenso y el viaje psicológico de Poe, lo que si queda claro es que Griffith evoluciono muchísimo técnicamente y con esta cinta se prepararía ya para las grandes ligas, el año siguiente entregaría la majestuosa "The Birth of a Nation", y eso ya se nota, el montaje, los elaborados y cuidados intertitulos, los juegos y efectos con la cámara que van mucho mas allá de trucajes y trucos, la historia dramática y los personajes bien dibujados y además complejos para la época. La historia intenta conjuntar varias historias de Poe y aunque no se acerca ni remotamente a ninguna de ellas si logra tener un estilo propio que se parece mucho mas a las historias que agradan al afamado director que al escritor, y para muestra el final que no puede ser mas griffthiano, asi vemos al inicio como un tío (Spottiswoode Aitken) se hace cargo de su sobrino y pone toda su vida en el para hacerlo un hombre de bien, ya grande el joven (Henry B. Walthall antes de "The Birth of a Nation) se enamora perdidamente de una chica (Blanche Sweet) pero su tío se rehúsa a su relación por lo que el joven comienza a desesperarse. Esta parte de la cinta esta bien hecha, Griffith lo hace impecable técnicamente pero por ahí hay una historia secundaria que sencillamente no aporta nada, cuando el sobrino toma una resolución llega la etapa tipo Poe, el sobrino idea un plan para asesinar al tío, pero cuando lo logra las cosas se complica, un tipo que lo vio cometer el asesinato lo chantajea, los amigos del tío y la policía desconfía de el y hasta su amada Annabel piensa lo peor, por su lado el joven comienza a volverse paranoico, contrata ayuda y planea un escape mientras el fantasma de su tío lo vuelve loco hasta que finalmente en un interrogatorio el tipo se desquicia y confiesa, por supuesto que Griffith le mete su estilo y el tipo tiene alucinaciones religiosas con el mandamiento de no matar y una persecución final con balacera que culmina en grande y finalmente una vuelta de tuerca que nos regala un final de esos que también encantan al director, no me molesta el final exageradamente religioso ni que siempre tenga que hacer todo en grande pero si que al final haya traicionado la esencia de Poe para que la gente saliera contenta del cine, ahí es donde creo que falla mas la cinta, pero cumple y técnicamente ya mostraba maneras. Calificación: Bien