Conocido en sus inicios como el "Hollywood's First Home of Spoken Drama", El Capitan Theatre fue construido gracias a la iniciativa, una vez más, de Sid Grauman y el promotor inmobiliario Charles E. Toberman. Junto al Egyptian y al Chinese, se convirtió en uno de las tres grandes salas que debían iluminar Hollywood Boulevard. Inaugurado como teatro en 1926, los promotores buscaron la estética colonial española en su diseño exterior y, como consecuencia, también el nombre del mismo respondió a esa voluntad. La firma de arquitectos Morgan, Walls & Clements se encargó del diseño exterior mientras que Albert Lansburgh diseñó la ambientación interior inspirada en la India. A diferencia del Chinese y el Egyptian, El Capitán se dedicó exlusivamente al teatro durante sus primeros años de actividad. Se representaron más de 120 obras aunque la Gran Depresión hizo estragos en la taquilla y hubo que reconducirse hacia la exhibición de películas, algo que económicamente resultaba más asequible. Allí fue donde Orson Welles presentó Ciudadano Kane (1941) en una gran premiere. Poco después hubo cambio de propietarios, lo que provocó nuevas obras que cerraron la sala durante un año. Reabierto en 1942, con el nombre Hollywood Paramount Theatre, fue escenario de premieres exclusivas del estudio de Melrose Avenue hasta que las leyes antimonopolio le obligaron a ceder parte de la propiedad a otras empresas. En la década de los 80, la cadena Pacific Theatres se convirtió en el dueño mayoritario y atrajo la atención de Walt Disney Company para hacer que la sala se convirtiera en escenario de sus premieres mundiales. Ante la posibilidad de tener un cine en el corazón de Hollywood, Disney invirtió 14 millones de dólares en una importante restauración de la sala y sus anexos. Se recuperó la decoración original al mismo tiempo que volvió el nombre El Capitán. La premiere de Rocketeer en 1991 fue el acontecimiento que reabrió la mítica sala al público. Desde entonces, muchas de las grandes producciones de la casa realizan sus premieres allí. Su programación regular consiste en la proyección periódica de clásicos Disney. A su lado se encuentra el Disney's Soda Fountain and Studio Store (restaurante y tienda temática) y el estudio de televisión donde se graba el late night de Jimmy Kimmel, que se emite en la cadena ABC (compañía subsidiaria del conglomerado Disney). Las luces de El Capitán iluminan más que nunca el corazón de Hollywood y solo hay que ver su restaurada taquilla para saber que allí el cine no solo se proyecta, también se respira.