Revista Coaching

Cómo reaccionar ante las críticas

Por Maria Mikhailova @mashamikhailova
Cómo reaccionar ante las críticas

En este post quiero hablarte de qué hacer si recibes críticas. Si te critican. Si te juzgan. Si hablan mal de ti a tus espaldas o directamente...

Y quiero darte algunas respuestas: cómo es el proceso mental o hasta qué punto pueden llegar a afectarte las críticas, qué puedes hacer o qué necesitas pensar para que las críticas no te afecten o no te hagan daño.

Y como es habitual, post también está acompañado de un vídeo que grabé para hablar de este tema.

¿Qué son las críticas?

En primer lugar, vamos a ver qué son las críticas o los juicios hacia ti.

Básicamente, cuando criticamos o cuando juzgamos a alguien, es porque nos han hecho algo que consideramos que es injusto o cuando sentimos que puede ser injusto para los demás.

Pero también puede darse el caso de que critiquemos a una persona porque simplemente no coincide con nuestra manera de ver el mundo, de hacer las cosas o consideramos que hay otra manera mejor de hacer las cosas.

Con lo cual, casi siempre, la crítica tiene que ver con la propia persona que la emite. Es decir, critico algo porque me han ofendido, me han hecho daño... o puede ser simplemente porque lo que la otra persona hace no concuerda con mi visión del mundo, con mis valores o con mis creencias.

Por tanto, si partimos de ahí, nos damos cuenta de que la crítica en el fondo no tiene por qué tener que ver con nosotros. Aunque a veces puede ocurrir que sí lo sea. Es decir, hay un conflicto de intereses entre dos personas.

Realmente lo que ocurre con las críticas y los juicios es que muchas veces son una forma de escaparnos de nuestra realidad. Cuando criticamos a alguien (o cuando alguien nos critica sin fundamento o sin necesidad de hacerlo), es porque esa persona no coincide con nuestra manera de ver el mundo.

Tipos de problemas, las críticas como vía de escape

Esta vía de escape que utilizamos a través de las críticas es un problema de seguridad que es como llamamos a este tipo de problemas en coaching estratégico: los problemas de seguridad y de calidad.

Un problema de calidad es un problema bueno, necesario. Es un problema que necesitamos afrontar porque nos permite crecer, desarrollarnos, conseguir nuevas cosas.

Mientras que un problema de seguridad es algo que no es agradable, pero ya lo conocemos y estamos acostumbrados a actuar así. Por ejemplo, las críticas.

Tal vez para mí sea muy fácil criticar a esa persona porque estoy acostumbrada a criticar a la gente que no coincide con mi manera de hacer las cosas. De esta forma, esa energía negativa que tengo dentro o esa insatisfacción de precisamente no abordar mis grandes problemas buenos (problemas de calidad) la estoy sacando hacia afuera a través del acto de criticar.

Críticas disfrazadas de buenos consejos

A veces parecen (pero sólo parecen) ser críticas constructivas. A mí me llegaron a escribir emails del tipo: "María te quiero dar un consejo...", "María me parece que deberías hacer esto o lo otro...", "Deberías hablar así en tus correos...", "Esta opinión que tienes sobre algo no me parece adecuada porque tú eres coach y deberías hablar de manera muy general, no particular. Nunca dando tu opinión..."

Es decir, son opiniones de otros diciéndome cómo debo opinar o cómo debo hacer mis cosas.

Aún así, ¿por qué hacemos eso?

¿Qué esconden realmente las críticas?

Yo puedo leer un correo que no coincide conmigo o ver una situación que no va con mis valores y alejarme de esa situación. En el caso de un correo, de hecho, siempre puedo desuscribirme de aquella persona que no va con mis valores. Yo lo he hecho en varias ocasiones y no hay nada de malo en eso. Para eso está nuestra libertad.

Pero hay muchas personas que necesitan decirlo. Y cuando sientes que necesitas decir tu opinión a esa otra persona, es porque ha resonado con algo tuyo. Algún bloqueo propio. Algo que no te atreves a hacer, por ejemplo. Puede que te cueste pasar a la acción porque tienes miedo. Puede ser incluso la envidia. Es decir, esa persona a la que necesito dar mi opinión o que juzgo está haciendo cosas que yo no me atrevo a hacer.

Incluso muchas veces esas críticas, sobre todo en el mundo online (te sonará la típica figura del trol o de los haters que todos conocemos), son personas que se esconden detrás de cuentas de correo o de redes sociales impersonales con fotos ficticias o sin foto siquiera, con nombres falsos o sin nombre...

A mí me han llegado a escribir personas que no sabía si eran hombre o mujer porque ponían coaching o ponían palabras sin sentido para que no pudieras identificar quién estaba detrás.

Por desgracia hay algunas personas que hacen eso. Se esconden detrás del anonimato, atacan a los demás de forma más o menos agresiva.

Aunque a decir verdad, no tienen por qué ser mails agresivos. Pueden llegar a ser emails muy correctos. Mensajes muy educados. Pero el fondo de estos mensajes es: "Tú no estás haciendo las cosas bien". "Yo las hago bien". "Yo sé cómo hacerlas". "Tú no las estás haciendo cómo deberías. Por tanto, tú no vales".

En definitiva, como ya te he contado en más ocasiones, hagas lo que hagas, te van a criticar.

Claves del Coaching para afrontar las críticas

Resumiendo: si a ti te han llegado estos mensajes, ya sean de personas de tu entorno o personas anónimas porque estás en el mundo online , piensa que las críticas siempre es algo de ellos. No es algo tuyo.

Pero si resuena contigo, es que hay también algo tuyo que se ha movido.

Si te hubiesen dicho algo que no te afecta o que no coincides con ello, dejarías pasar la situación.

No estoy hablando por supuesto de insultos graves o cuando intentan claramente atacarte. Me refiero a esas pequeñas críticas envueltas en buenas intenciones. Si a ti te han llegado a afectar, como a mí me ha pasado en varias ocasiones, es que algo ha resonado en ti.

Y si así sucede, lo único que tienes que hacer es mirarte tú por dentro. Qué es lo tuyo en esta situación. Es la famosa ley del espejo.

  1. Pregúntate: "¿Qué es aquello mío que se ha sentido movido, atacado, afectado por el comentario de esta persona?".
    Quizás yo soy la que cree que no soy suficiente. Quizás yo creo que no estoy haciendo las cosas del todo bien. Quizás soy yo quien cada vez que escribo un email se lo piensa mil veces para que esté perfecto y nadie se sienta ofendido, y aún así hay gente que se siente ofendida.
  2. Revisa todas esas creencias.
  3. Observa todos esos miedos.
  4. Analiza aquello que realmente te ha impactado o afectado de esta crítica.

Recuerda que esa crítica no es tuya en el fondo. La crítica siempre tiene que ver con la persona que la emite, pero también puede tener que ver contigo, siempre que a ti te afecte.

Y ahí es donde empieza el trabajo de crecimiento personal.

Así que, si quieres trabajarte por dentro, si quieres descubrir esos problemas de seguridad y calidad que tienes en tu vida y aprender cómo manejarlos, si quieres aprender cómo enfocarte en lo importante, en lo esencial que no estás haciendo y dejar de lado todo aquello que te está quitando y restando energía... Si quieres aprender a lidiar con esos problemas de seguridad, ya sean críticas hacia los demás o hacia ti mismo, tienes mi curso SelfCoaching.

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Y ahora te toca a ti. Espero que me compartas en los comentarios qué te ha parecido este post y qué estrategias utilizas tú para afrontar las críticas. ¿Cómo llevas las críticas y los juicios de los demás? ¿Te suelen afectar o, por el contrario, no te molestan? Me encantará leerte.


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