Hacer una buena salsa de tomate casera es engorroso, no nos vamos a engañar.
Pero el resultado siempre merece la pena.
Tanto si haces la salsa en la cocina como si la haces en el horno ,tiene sus ventajas e incovenientes.
- En el fuego salpica lo suyo.
- En el horno quedan las fuentes para un refregado bueno.
- Además, si queremos una textura gordita,lo mejor es pasarla por el pasapurés de toda la vida y hay que echarle ganas.
Total, que ,a punto de terminar mis vacaciones, que es cuando me permito meterme en estos líos, y ,estando en la mejor temporada del tomate, me lié la manta a la cabeza.Eso sí, un par de kilos de tomates fue suficiente.
Ingredientes
- Dos kilos de tomate pera
- Una cebolla
- Un diente de ajo
- Medio pimiento verde
- Medio pimiento rojo
- Sal
- Una pizca de azúcar
- unas hojas de tomillo
- Unas hojas de albahaca
- Aceite de oliva virgen
- Corta los tomates en cuatro (alíñalos con sal y una pizca de azúcar), las cebollas en pluma y los pimientos en tiras.
- Coloca la cebolla en el fondo de las fuentes o recipientes que vayas a usar;luego los pimientos y los tomates encima.
- Pon las hierbas aromáticas y riega con el aceite
- Pon a asar en el horno sobre una hora y cuarto.
- Deja templar un poquito y tritura con el pasapurés.
- Esteriliza unos tarros, embota y coloca boca abajo para hacer el vacío.
Fuente:La cocina de fabrisa