Un entrante siempre nos abre el apetito y nos prepara consumir el plato principal que viene. Se puede dar rienda suelta a la imaginación, a los colores, a la combinación de la materia prima. Se trata a veces de mostrar tu lado más creativo. No obstante, en ocasiones una buena rebanada de pan de hogaza combinada con ingredientes saludables y una ensalada pueden convertirse en un plato perfecto para una cena. La propuesta que te traigo hoy es una receta hipersencilla y rápida y por su mezcla de sabores, única para el paladar. Además equilibrada en cuanto a ingredientes acompañándola de un poco de rúcula con tomate y unos frutos secos.
Este costrini de queso emmental y pera caramelizada se deshace en la boca. El fruto seco crujiente sobre la parte superior proporciona un contraste inmejorable. ¿Te animas a compartir esta delicia con unos amigos para la próxima reunión?
Ingredientes para 4 rebanadas de pan
- 4 rebanadas de pan de hogaza o con buena
- 150 g. de queso emmental rallado
- 2 peras maduras cortada en cuadros
- 1 cuchara de vinagre balsámico
- 2 cucharadas de miel
- 1 cucharada grande de mantequilla
- Avellana picada
Pon a calentar la mantequilla y en ella fríe a fuego muy lento las peras. Cuando ya esté pochada, añade primero el vinagre balsámico. Cuando esté integrada, por último, pon la miel. Deja que suelte todo el jugo de la pera y se caramelice. Para ello tendrás que ir dándole vueltas con cuidado de que no se queme.
Cuando las peras tengan un color dorado. Añade el queso a fin de mezclarse, aunque no se derrita del todo.
Sirve equitativamente sobre las rebanadas de pan y gratina en el horno.
Al sacarlas, añade avellana picada para hacer el contraste crujiente.