Las adaptaciones literarias son y serán siempre algo capaz de levantar infinitos juicios en la gran pantalla; citas textuales, inspiración, adaptaciones contemporáneas... La sección Un certain regard del Festival de Cannes de este año acoge “Student”, el regreso después de años de hiato de Darezhan Omirbayev, adaptando “Crimen y castigo”.
¿De qué va?
Esta película está inspirada en la novela de Dostoyevski "Crimen y castigo". La acción se desarrolla en el Kazajistán de hoy en día. El protagonista de la película es un estudiante de filosofía. Alquila una habitación en el sótano de una casa ocupada por una anciana, lejos del centro de la ciudad, y padece la falta de dinero y la soledad. En ocasiones, va a comprar pan al tendero de la esquina y poco a poco le asalta la idea de robar la tienda. También está influido por un entorno de pobreza y un entorno competitivo, regido por la división entre ricos y pobres, entre fuertes y débiles. El estudiante está condicionado por valores dudosos y finalmente comete su crimen, durante el cual el tendero y una cliente se convierten en sus víctimas. Tras estos sucesos, el estudiante se siente todavía más solo y corta cualquier relación con su entorno. El sentimiento de culpabilidad crece en su interior, especialmente cuando su madre y su hermana, a las que tanto quiere, vienen desde las afueras para visitarle. Poco a poco, el estudiante se da cuenta de lo que ha hecho y se dispone a entregarse a la policía. La película finaliza con un toque de optimismo, ya que una joven que está enamorada de él acude a la cárcel para visitarle.
¿Quién está detrás?
No es la primera vez de Darezhan Omirbayev en Un certain regard. De hecho, ya ganó este premio en 1998 con Tueur à gages. Cómo no, la historia tiene detrás a uno de los grandes d ella litaratura universal: Fyodor Dostoyevski.
¿Quién sale?
Yedyge Bolysvayev es el protagonista de la historia, lo que parece ser su primera vez en la gran pantalla internacional. Lo acompañan Maiya Serkibayeva y Bakhytzhan Turdaliyeva.
¿Qué es?
Parecemos estar ante el “Crimen y castigo” de nuestra sociedad de crisis: mezclando la versión que Kaurismäki hizo del mismo título con imágenes y tiempos de escena de Bresson.
¿Qué ofrece?
La crítica parece aplauditr el retrato social que la película hace de la nueva sociedad Kazakh, aunque lamenta la poca fidelidad al relato original, empezemos con la prensa americana.
Leslie Felperin de Variety aplaude la trayectoria de Omirbayev diciendo que “ofrece otra vez un retrato mordaz de su patria, que, tal y como muestran las imágenes, se encuentra en el umbral de la pérdida de su alma en la persecución de Range Rovers, culebrones banaes y otros placeres efímeros”.
Siguiendo con esto, Howard Feinstein comenta en Screen la habilidad del director de no depender de la palabra; pues “se vale de clips de televisión, espcialmente descripciones lietrales de darwinismo y su aplicación a la naturaleza: animales haciéndose pedazos”.
Otros lamentan el poco gusto de la adaptación de “Crimen y castigo”; Stephen Dalton, de The Hollywood Reporter nos dice que “Infortunadamente, Ombribayev fracasa tanto en la trama del asesinato como en su subtexto político con mucho suspense o convicción. En vez de ello, su protagonista aparece catatónico, en oposición al Raskolnikov siempre maniático y auto-cuestionante de Dostoyevski”.
Al otro lado del charco, la crítica británica parece tender más a la moderación. En el blog del British Film Institute, Geoff Andrews comenta que “aunque sería indudablemente erróneo hacer grandes alabanzas del film de Omirbayev, ciertamente no defrauda a nadie y es gratamente acogida con sus modestas ambiciones”.
Finalmente, esta película acumula hasta ahora un estupendo 7,34 en el cuadro de crítico de Micropsia, destacando entre sus notas el 8,5 de Javier H. Estrada; el conforme 6 de Neil Young o el 3 de José Luis de Lorenzo.