Las plantas medicinales son una manera natural y sencilla de eliminar las impurezas de nuestro cuerpo y evitar la retención de líquidos que suele causar una sensación de aumento de volumen por la acumulación de agua en algunas partes de nuestro cuerpo.
Existen muchas plantas diuréticas para la retención de líquidos que favorecen el funcionamiento renal. A continuación te mostramos las más efectivas:
Diente de león
Podría decirse que, entre todos los diuréticos naturales, el diente de león es el más suave, por eso es el primero que ponemos en este listado. Es el que se recomienda para cualquier persona, sin importar su condición. Depura el organismo y limpia los riñones.
Otra infusión diurética altamente popular es la cola de caballo, que además de activar el trabajo de los riñones cuenta con otras propiedades como favorecer la salud de pacientes con ácido úrico, reumatismo o artritis.
La alcachofa es un vegetal muy conocido por sus propiedades depurativas y diuréticas, por eso su infusión se ha vuelto cada vez más y más popular. Se pueden adquirir sus hojas secas en las tiendas de producto naturales o elaborar la infusión hirviendo directamente algunas hojas frescas. La recomendación es tomar 2 tazas diarias.
El hinojo, al igual que la alcachofa, es una planta comestible que también puede prepararse en infusión. Lleno de propiedades como el alivio a las molestias menstruales, la tos o la bronquitis, es también una excelente infusión diurética. Se recomienda consumir tres tazas al día.
Otra de las infusiones diuréticas altamente efectivas es la salvia, que además de contar con propiedades antiinflamatorias que favorecen el tratamiento de condiciones como la amigdalitis, es también una buena aliada para reducir la retención de líquido y activar nuestros riñones. La recomendación es ingerir 3 tazas al día.
Además de las plantas medicinales, te recomendamos algunos hábitos saludables que te ayudarán a eliminar los líquidos de tu cuerpo:
Elimina la sal – Para eliminar la retención de líquidos de nuestro cuerpo hay que seguir una dieta baja el sodio por lo que es recomendable evitar alimentos que lo contengan como los alimentos procesados, enlatados o en conserva, las bebidas gaseosas y el alcohol. En tus comidas puedes sustituirla por hierbas aromáticas o condimentos.
Incrementa el consumo de frutas y verduras de temporada ya que estas aportan altos niveles de nutrientes y agua.
Bebe al menos 2 litros de agua al día – Si te cuesta un poco, puedes beberla en infusiones o añadiendo un poco de jugo de limón para que sea más agradable.
Muévete – Realiza actividades que favorezcan la circulación sanguínea. Puedes caminar, bailar, o montar en bici.
Descansa – Está demostrado que el reposo es esencial para la retención de líquidos. No dormir las horas adecuadas puede contribuir a hinchazón en las piernas, abdomen, tobillos y manos.
No utilices ropa o calzado muy ajustados.
Si tu actividad laboral te obliga a estar sentada durante mucho tiempo, haz algún descanso para estirar las piernas y dar un ligero paseo por la habitación.
Evita las comidas ricas en azúcares.
Reduce la toma de medicamentos y sustitúyelos por remedios naturales.