Autor: José María Lliró Olivé (a) “Max Cameron”
Colección: Bang Agente 000 nº 16
Edita: Ferma, Barcelona,. 1968
Como contamos anteriormente, el número 15 de esta colección era el último que escribía para la editorial Ferma Alexis Barclay, solo Dios sabe por qué motivos. Aunque no es aventurado que tuviera que ver con una cuestión de derechos del os personajes, ya que Barclay seguiría con los mismos personajes en una colección homónima editada por Euredit. Una pista para suponer que esto tuvo que ver es justamente esta novela, donde lo único que queda de la premisa original es una organización secreta que combate el crimen internacional. De ahí en mas cambia TODO.
Empezando por el nombre: BANG es el acrónimo ahora de “Base Anticrimen Nueva Geminis” (en vez del mas enrevesado “Bringer Advine Nomenclatura Geminis” de Barclay).Su base ya no es más Hong kong sino en una misteriosa isla del Pacífico Sur llamada Devil`s Island. Hay tres líderes superemos a cambio de uno. El contenido de aparatos tecnológicos a lo James Bond aumenta exponencialmente. Y los agentes son un elenco completamente diferente. Parece claro que lo único que pudo retener Ferma era la marca registrada de la serie y tenía que cambiar completamente con todo.
En esta aventura conocemos al agente Paul Briand, ex mercenario y aventurero al que le llega la oferta de entrar a trabajar en una misteriosa organización mercenaria, lista para generar un golpe de estaod ne un país petrolero… y, para lograrlo tiene un plan de diversión para nada menor: hacer asesinar la premier chino en una reunión multilateral el mismo día del ataque (para que la invasión pase piola en las noticias). Y tiene un final realmente apocaliptico. Atenti tambien porque aparece un segundo agente Bang, el inglés Gordon McQuade (otra diferencia: la cooperación entre agentes Bang parece más común que antes) que aparecerá en otrasn ovelas mas adelante.
Pero lo que se mantiene constante es la muertey la violencia en las peleas. Hay muertos y torturados por doquier.
Y las tapas de Cortiella que se siguen manteniendo con el mismo nivel de calidad.
Estilísticamente, Cameron parece escribir unos relatos mas duros , mas “machos” en su planteamiento y ejecución.. Tampoco igual es que sea un cambio notorio: Bang sigue siendo una serie escrita profesionalmente peor no mucho más, una de las infinitas series similares de esos años. Nada espectacular.