Ayer estuvo de cumple mi BFF, Vania, y junto a ella, la Pau, y una compañera de U suya, lo celebramos almorzando en el Johnny Rockets del Alto Las Condes.
El lugar y el ambiente son geniales, y, aunque no es barato, no tiene precios inalcanzables para un joven mantenido por sus padres sin interés en conseguir un trabajo (es decir, yo).
Muchos deben ya saber que cada cierto rato los empleados del lugar bailan, nos tocó ver eso dos veces mientras estábamos ahí. Existe también la opción de que le canten “Cumpleaños Feliz” a quien visite el lugar en su día, y como Vania estaba de cumpleaños, lo hicieron (subí un vídeo a Instagram).
Mi almuerzo, un Chicken Club Sandwich sin tocino (el de la imagen de arriba, $5500.-) más bebida con refill infinito, como dijo la Pau, costó un poco más de siete mil pesos ($7000.-).
Luego de almorzar fuimos a dar vueltas por el mall. Entramos a dos librerías y agregué tres libros a mi lista de deseos imaginaria: “Eleanor & Park” de Rainbow Rowell; un libro de fotografía cuyo nombre no recuerdo (y que, pensándolo bien, ya no quiero); y “One Direction. Atrévete a Soñar” (sí, qué maduro). También estuvimos un rato sentados en el mirador, bebiendo refreshers de Starbucks.
Fuimos a la casa de la compañera de Vania a descansar un rato, y vi, por primera vez en mi vida, Avenida Brasil. Entendí toda la teleserie con el capítulo que vi, al parecer el más importante.
Después de reponer energía (literalmente para mi teléfono), nos dirigimos a Teclados, un pub/bar/qué-sé-yo en Manuel Montt.
El día terminó luego de regresar a casa; estaba agotado. El colectivero que nos tocó era bastante extraño.
Puzzle Bobble
Karate Blazers
Puzzle De Bloques
Magical Cat Adventure