Realizando un censo de aves este otoño en la zona de Nieva consigo localizar y fotografiar un macho de curruca cabecinegra Sylvia melanocephala. Es uno de los varios que habitan en este lugar, a los que se puede localizar fácilmente por su inconfundible reclamo, que lanzan con insistencia.
Hasta hace poco tiempo la curruca cabecinegra no habitaba en Asturias. Es una especie mediterránea, residente en zonas muy termófilas. Aproximadamente hace 20 años comenzaron a detectarse los primeros ejemplares, más o menos por ambas esquinas del litoral asturiano. Se supone que colonizó por el oeste a partir del litoral gallego, y por el éste a partir de ejemplares que fueron poblando Cantabria por el valle del Ebro. Este es el mapa de nidificación del Atlas SEO, de principios del siglo XXI.
Hasta hace unos 10 años la curruca cabecinegra se mantuvo escasa, con apenas unos pocos territorios repartidos por Asturias, sobremanera en la zona litoral. Pero en la última década ha experimentado una verdadera explosión. En el concejo gozoniego se encuentra ya por todas partes, sobre todo en las zonas de matorral con abundancia de zarzas.
Este es el mapa que se puede obtener en la plataforma observado, con datos de estos 10 años, donde se observa que ya ocupa todo el litoral asturiano, y que continúa su expansión subiendo por Francia.
La curruca cabecinegra se encuentra ya también en zonas que antes eran hostiles para la especie, como algunos cascos urbanos. En la ciudad de Avilés se reproducen ya unas pocas parejas, ésta es una hembra que pude fotografiar hace unos pocos días en el paseo de la ría, alimentándose en el envés de las hojas de los sauces, como un mosquitero.