Revista Ilustración
No encuentro otra explicación acerca de la utilización de Internet por parte de los escritores contemporáneos que la aplicación de la teoría y práctica del community manager a su trabajo. Me explico. Un community manager utiliza las herramientas que brinda internet con la finalidad de aumentar el tráfico de usuarios en los diferentes perfiles que una empresa mantiene en la red. Con el paso de los años esta figura se está implantando en prácticamente todas las grandes empresas, ya que generan una comunicación directa con los clientes, que pasan a ser amigos, con los que interactúan en un diálogo horizontal y cuya última finalidad es, simplemente, aumentar las ventas mediante canales indirectos. Esto nos lleva irremediablemente a una tesis básica: pasamos de decirle al consumidor lo que necesita a preguntarle qué es lo que necesita.
A priori, no existe una gran diferencia entre ambas, pero en la práctica sí. Desde luego, no es lo mismo recibir un newsletter en nuestro correo donde nos venden una serie de productos que acercarnos a esos productos mediante páginas de facebook, twitter, blogs... estas aplicaciones de Internet, asociadas al marketing tradicional (regalos, descuentos, promociones...), consiguen mejores resultados.
No vamos a negar que tanta exposición mediática puede generar el hundimiento del negocio en cuestión de horas. Un error de comunicación, un mensaje equivocado, una declaración fallida, pueden hacer que la imagen de una compañía se venga abajo. Las redes sociales tienen ese poder. Elevan y tumban cualquier cosa en cuestión de horas.
Últimamente, me fijo en la utilización de Internet por parte de algunos escritores. Estos escritores profesionales, que se dedican a la literatura a tiempo completo, manejan las técnicas del community manager de una forma sublime y, en ocasiones, con la misma mala baba que cualquier empresa desalmada.
Veamos algunas herramientas fundamentales:
1. Google Analytics: posiblemente, la herramienta estadística más importante del buscador norteamericano. A través de ella podemos conocer cualquier detalle de todas y cada una de las visitas que recibimos en un blog o página web. De esta manera, podemos saber qué demanda nuestro público, cuáles son sus intereses, qué contenidos elevan el interés y cuáles son perfectamente prescindibles.
2. Metatags e indexación en Google: los tags y metatags ayudan a Google a establecer sus parámetros de búsqueda. Se trata de etiquetas que llaman al buscador para que nos tome en cuenta en la navegación de los usuarios. Cuantas más etiquetas de este tipo consigamos establecer, mayores serán las oportunidades de que alguien, de forma consciente o inconsciente, acabe en nuestra página web o blog. Si quieren que su blog se cuele entre los primeros, publiquen muchos contenidos editoriales, cinematográficos, políticos, deportivos... aquellas cuestiones de su cosecha puede que resulten irrelevantes para Google, así que céntrese en publicar todas las noticias de actualidad que pueda. Esto dará como resultado un aumento exponencial de sus visitas: contenidos actuales populares + antigüedad del blog/web + enlaces en otros blogs/webs = alta cuota de visitas.
3. Redes sociales. 3.1. Utilice las redes sociales para entablar amistad (diálogo) con otros usuarios. 3.2. Participe de forma constante en las conversaciones de los otros. 3.3. Nunca diga una palabra de más y demuestre un gusto exquisito con sus interlocutores. De este modo, los amigos de sus amigos serán sus amigos. 3.4. No intente colar links de su blog o web constantemente, es mejor filtrarlos poco a poco junto con otros contenidos. 3.5. No intente pasarse de listo en Twitter, pero intente estar atento a los hastags del día. Todo ayuda. 3.6. Agregue sin cesar amigos, así tendrá más probabilidades de construir mayores redes con otros usuarios.
4. Participación: haga como que escucha, pero no se olvide de que la finalidad última en una empresa y cualquier escritor es vender sus productos. Como me dijo una vez Sergio Gaspar: el mejor amigo de un escritor es aquel que compra sus libros. Intente tener muchos amigos, tarde o temprano, conseguirá vender muchos ejemplares y traspasar las barreras del olimpo literario.
Se trata de un trabajo de fondo, muy duro y constante, así que no cesen en su esfuerzo. Puede que El País Semanal o Yo Dona se fijen en usted y en sus millones de seguidores para cobrar por fin por escribir. Eso sí, no olvide que un desliz puede acabar con toda su carrera en cuestión de horas. Los riesgos son los mismos para Coca-Cola y para usted, solo tiene que lograr mayor nivel de exposición que ellos.
Si después de esto, su blog sigue perdido entre la densidad de Google, es que no ha leído bien.