A pesar de que cada día estamos más acostumbrados a hablar de redes sociales, blogs, comunicación en red, interacción en el medio online y otros conceptos, en el tejido empresarial de nuestra España cañí siguen existiendo empresas estancadas en el Jurásico, en cuanto al mundo online se refiere.
Si quieres viajar al pasado no necesitas máquinas estrafalarias ni estudiar leyes sobre el espacio/tiempo, no tienes más que indagar por la red y aterrizarás en alguna que otra web de empresa, que no ha sufrido variación desde el día en el que fue creada y ¡amigo! Qué mala imagen da eso…
Pero comprendamos con más detenimiento a qué me estoy refiriendo. El mundo online ha experimentado una evolución de la llamada Web 1.0. a las Web 2.0. y aunque la mayoría de vosotros conoceréis las diferencias entre ambas, mejor comenzar con una breve descripción de cada una de ellas:
- WEB 1.0. Cuando el uso de Internet comenzó a masificarse y las empresas comenzaron a tener presencia en la red, creaban webs donde publicar sus productos y dar algo de información de la propia empresa. Lo lógico es que algunas incluyeran algún formulario de contacto o el número de teléfono. La web 1.0. no era más que un canal donde las empresas lanzaban un mensaje unidireccional sin esperar ningún tipo de interacción con sus clientes. Disponer de una web era como estar presente en un listín de empresas.
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WEB 2.0. Los usuarios/clientes comienzan a tener voz en Internet. No solo buscan información si no que además desean interactuar con la empresa y ofrecer opiniones al respecto. La empresa encuentra un valor añadido en la medida de que escuchando al cliente puede adaptar su oferta de forma más adecuada al perfil del mismo y por tanto mejorar su servicio. Gestionar de forma adecuada este tipo de conversaciones permite tener al cliente como aliado, ya que este se convierte en un generador de contenido que puede ser muy beneficioso para mi compañía siempre y cuando sepa gestionarlo adecuadamente.
Es con la web 2.0 cuando nacen los blogs, redes sociales y demás sitios sociales que hoy conocemos y donde se generan conversaciones por parte de nuestros clientes. Por ello es fundamental, al implantar cualquier tipo de estrategia en estos medios, llevar una correcta monitorización de esas conversaciones y analizar los datos que nos interesan derivados de dichas conversaciones para la posterior toma de decisiones de una forma correcta. Es por ello que la analítica web se convierte en un elemento fundamental en esta nueva etapa.
El problema ya no es solo que muchas empresas no se hayan adaptado aún a la web 2.0., si no que pronto ésta formará parte del pasado dejando paso a la web 3.0., conocida como web semántica o inteligente. Se basa en la evolución de las redes sociales bajo los siguiente conceptos:
– Búsquedas perfeccionadas hasta conseguir un único resultado adaptado a nuestra exacta demanda de información.
– Contenidos accesibles sin navegación desde cualquier dispositivo y lugar.
– Tecnologías de inteligencias artificial para la localización y selección de información.
– Geolocalización avanzada.
– Web 3D: extensión al mundo virtual.
A pesar de que los tiempos evolucionan, el miedo a cambiar y empezar a hacer las cosas de manera diferente a como se venían haciendo hasta entonces, provoca que muchas empresas se estanquen y decidan no adaptarse. Al llegar crisis económicas como la que conocemos y de las que no nos libra nadie, pues son cíclicas y ya vendrán otras (¡pero espérate que salgamos de ésta!), solo las empresas que miran hacia delante y se adaptan continuamente al entorno, son aquellas que sobreviven.
Disponer de una web 2.0. no es ningún tipo de moda, si no una necesidad. La empresa debe estar donde sus clientes generen conversación y favorecer mecanismos para participar en ella. Aprovechar el feedback generado por los clientes es fundamental para ofrecer productos y servicios cada vez más adaptados a las necesidades de nuestros clientes. Hemos pasado de un modelo caracterizado por comunicar y persuadir a un modelo cíclico consistente en comunicar, escuchar y comunicar en base a esa escucha previa.
¿Debe por tanto una empresa que aún dispone de una web 1.0. evolucionar hacia la web 2.0.? No es que debe, es que debió de haberse adaptado hace un tiempo atrás. La imagen que transmite una empresa que solo ofrece información es la misma que la de aquellas empresas que a pesar de disponer de una web 2.0. y estar presente en redes sociales, están continuamente ofertando productos. Pero de las buenas técnicas y estrategias a llevar a cabo en redes sociales hablaremos en otra ocasión.