Da igual que salga del taller y vaya directo para el desguace, si
de todas formas tenemos que seguir pagando el mantenimiento de toda una
flota de alta gama cuyos repuestos y servicio nos cuestan miles de euros
a cada cuidadano español. Esto nos pasa por vivir por encima de
nuestras posibilidades y mantener una monarquía que nos deja arruinados a
la mayoría. Y lo más triste es que a mucha parte de esa mayoría le encanta seguirlos manteniendo.
Sale del taller.