Como soy muy detallista y perfeccionista, me gusta que no falte ningún detalle cuando tengo invitados, por eso, empecé el menú con un cóctel de bienvenida, en esta ocasión hice una versión de la caipiroska pero con cerezas, aprovechando que están de temporada. ¡Estaba increíble!.
CAIPIROSKA DE CEREZAS
Por cada cóctel: 1/2 lima cortada en cuatro trozos; 8 cerezas deshuesadas y partidas por la mitad; 3 cucharaditas de azúcar moreno; hielo picado; 50 ml de vodka. PARA DECORAR: 1 cereza y 1 rodaja de lima.
Comenzamos por deshuesar y cortar las cerezas. Las ponemos en el vaso y le añadimos la media lima troceada y el azúcar. Con ayuda de un mazo para cócteles o de la mano del mortero en su defecto, presionamos bien la fruta para que suelte el jugo y se mezcle con el azúcar. Lo haremos con movimientos circulares durante unos tres minutos. Añadimos hielo picado hasta la mitad del vaso y acabamos con el vodka. Removemos bien y servimos en un vaso decorado con una cereza y una rodaja de lima.
Tras el cóctel llegó el aperitivo para abrir boca:
PIRULETAS DE HOJALDRE RELLENAS DE CHORIZO A LA SIDRA
Para el chorizo a la sidra: Chorizo fresco; 1 botella de sidra natural Para las piruletas: 1 lámina de hojaldre; 1 huevo batido; sésamo; orégano
Preparamos el chorizo a la sidra, para ello, ponemos los chorizos en una cacerola y los cubrimos con la sidra natural. Dejamos cocer a fuego lento durante una hora. Dejamos enfriar. Cortamos el chorizo en rodajas de medio centímetro aproximadamente y lo secamos bien para que no empape el hojaldre. Con ayuda de un cortapastas cortamos círculos de hojaldre, en una parte ponemos el chorizo, pintamos los bordes con el huevo batido y cubrimos con otro disco de hojaldre. Metemos el palito pinchado en la rodaja de chorizo y presionamos bien para que quede bien cerrado y el hojaldre no se abra en el horno. Pintamos con huevo y espolvoreamos con sésamo y orégano. Repetimos la operación hasta finalizar. Horneamos a 200º durante 10 minutos. Sacamos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla.
CARACOLAS DE CREMA DE CABRALES CON ALMENDRA CROCANTI Y DE MOUSSE DE OCA
2 rebanadas de Bimbo Enrollado; Mousse de Oca o similar; Crema de Cabrales; Almendra Crocanti (Mercadona).
El Bimbo Enrollados lo descubrí en Makro. Es un pan especial para este tipo de preparaciones y es como una rebanada de pan de molde doble y sin corteza. No es fácil de encontrar, así que os sugiero que utilicéis pan de molde sin corteza si no lográis verlo en ningún sitio. En el caso de los canapés de mousse, untamos el pan con el paté y lo enrollamos. En el caso de los de Cabrales, una vez untado el queso, espolvoreamos con almendra crocanti y enrollamos y envolvemos en papel film los rollitos. Formamos como un caramelo y metemos a la nevera durante un rato para facilitar el corte. Cortamos con el grosor deseado y dejamos que cojan temperatura ambiente antes de servir. Podéis rellenarlos a vuestro gusto: atún con tomate, atún y mayonesa, salmón ahumado y Philadelphia, jamón york y queso...
PRIMER PLATO: PIQUILLOS RELLENOS DE ATÚN Esta receta es de las primeras que aprendí a hacer cuando empecé a cocinar. Solía hacerla mucho cada vez que venían amigos a comer a casa, era y es todo un éxito, aunque debo decir que se nota que he aprendido y mejorado mucho. Para 5 personas RELLENO: tarro de pimientos del Piquillo (que vengan al menos unos 10); atún en aceite; 1/2 cebolla; 1 huevo batido; 2 cucharadas de miga de pan mojada en leche y escurrida; 2 cucharadas de tomate frito; sal; pimienta negra molida. REBOZADO: Harina; huevo batido; sal. SALSA: 1/2 cebolla; 1 zanahoria pequeña; 1 diente de ajo; 2 cucharadas de tomate frito; perejil fresco picado; 1 chorro de vino blanco; sal; aceite de oliva.
Comenzamos elaborando el relleno de los pimientos, para ello, ponemos a pochar media cebolla cortada muy, muy fina en una sartén con aceite. Mientras, batimos el huevo y le añadimos el atún bien escurrido, la miga de pan mojada en leche y también escurrida, el tomate, la sal y la pimienta. Una vez lista la cebolla, la escurrimos bien y se la añadimos. Mezclamos bien y rellenamos los pimientos. Pinchamos con un palillo para cerrarlos y los rebozamos pasándolos por harina y huevo y los freímos. Los ponemos en papel absorbente para que suelten el exceso de aceite y les quitamos el palillo. Elaboramos la salsa poniendo a pochar la cebolla, el ajo y la zanahoria. Pasados unos minutos, añadimos el vino y dejamos evaporar y añadimos el tomate. Salamos y dejamos cocer todo unos 10 minutos a fuego medio. Añadimos el perejil picado y pasamos por la batidora. Añadimos la salsa a los pimientos que habremos puesto en una fuente refractaria y metemos al horno unos 5-10 minutos. Están mejor a temperatura ambiente, así que es conveniente dejarlos enfriar un poco antes de servirlos.
SEGUNDO PLATO: SECRETO IBÉRICO AL HORNO CON SALSA CHIMICHURRI Y PATATAS ASADAS AL ESTILO INGLÉS CON GUARNICIÓN DE ENSALADA CRUJIENTE
Para el Secreto: 5 trozos de Secreto Ibérico; sal Maldon; pimienta rosa; azúcar moreno. Para el Chimichurri: 1/2 pimiento rojo; 1 pimiento verde pequeño; 1/2 cebolla; 1/2 diente de ajo; 1 limón; perejil fresco; ajo enp olvo; orégano; 250 ml de agua; 250 ml de aceite de oliva virgen; 125 ml de vinagre de vino; sal fina. Para las patatas: 5 patatas medianas; sal; aceite; mantequilla; ajo molido; cebollino fresco picado;pimienta negra molida; agua.
Comenzaremos elaborando el Chimichurri. Yo me basé en la receta de Paco Roncero. Poco tenía que ver con la de la foto, pero rica estaba. Para ello picamos el pimiento, la cebolla y el ajo de manera muy, muy fina. Pelamos el limón y lo batimos junto con todos los demás ingredientes excepto el aceite y las verduras previamente picadas. Mezclamos en un bol todo junto añadiendo el aceite poco a poco. Rectificamos de sal si fuese necesario y reservamos. Elaboramos ahora las patatas. Para ello, pelamos las patatas y las troceamos. Las lavamos bien y las dejamos un rato en agua para eliminar el exceso de almidón. Las escurrimos y las ponemos a cocer en agua con sal durante 8 minutos. Escurrimos y ponemos en una fuente de horno, añadimos sal, ajo picado, pimienta, cebollino picado y la mantequilla derretida. Metemos al horno a 200º durante 30 minutos removiendo de vez en cuando. Preparamos el secreto. Para ello, lo espolvoreamos con pimienta rosa molida, sal maldon y azúcar moreno. Lo metemos al horno 5 minutos después de haber metido las patatas también a 200º. Servimos todo junto acompañándolo con la salsa chimichurri.
GUARNICIÓN: ENSALADA CRUJIENTE No quería que mis invitados se fueran con hambre y por ello preparé esta ensalada para acompañar el segundo plato. 1 lechuga; 2 tomates medianos; 100 grs de queso parmesano; 1 mozzarella; 1 aguacate; PARA LA VINAGRETA: zumo de limón; aceite de oliva; vinagre de vino blanco; sal; pimienta negra.
Comenzaremos elaborando el crujiente de queso. Para ello, rallamos el parmesano y formamos con ello un par de bolas. Las ponemos en una fuente de horno forrada con papel vegetal y formamos dos círculos. Horneamos unos 10 minutos a 200º. Sacamos del horno y dejamos enfriar. En un bol ponemos la lechuga bien lavada y troceada, el tomate lavado y cortado en cuadraditos, la mozzarella troceada y el aguacate troceado y regado con zumo de limón. Añadimos el queso troceado reservando algunos trozos grandes para decorar y aliñamos con una emulsión de aceite, vinagre, sal y pimienta negra. El aliño hay que hacerlo en el momento de servir para que no nos ablande el queso.
EL POSTRE TARTALETAS RÁPIDAS DE CREMA PASTELERA Y CEREZAS Aprovechando que las cerezas están de temporada, decidí usarlas también para elaborar el postre. Tenía otra idea diferente pero al final me decidí por esta por su sencillez y sobre todo rapidez. En los supermercados Aldi encontré estas tartaletas de bizcocho muy bien de precio y se me encendió la bombilla:
Para la crema pastelera: 500 ml de leche; 1 trozo de piel de limón; 1 vaina de vainilla; 80 grs de azúcar; 40 grs de maicena; 4 yemas de huevo. Resto de ingredienes: Tartaletas; cerezas; cobertura para pasteles de frutas (Lidl); Physallis para decorar (opcional).
Elaboramos la crema pastelera. Para ello, ponemos a hervir la mitad de la leche con la piel de limón (sin la parte blanca) y la vainilla. Mientras mezclamos el resto de la leche (tibia) con la maicena, disolvemos bien y añadimos las yemas de huevo una a una terminando con el azúcar. Retiramos la vainilla y la piel de limón y añadimos la mezcla con las yemas de huevo poco a poco. Ponemos al fuego a intensidad media-baja y removemos hasta que espese. Dejamos enfriar. Rellenamos las tartaletas con la crema pastelera y cubrimos con las cerezas deshuesadas y cortadas por la mitad. Preparamos la cobertura para pasteles de frutas(lo que da brillo y un toque gelatinoso) tal y como nos indica el fabricante y untamos sobre las tartaletas con ayuda de una brocha de cocina. Decoramos con un Physallis y dejamos reposar antes de servir.
El menú estuvo muy rico, pero lo mejor fue la compañía. No hay buena comida sin buenos amigos. ¡Gracias chicos!
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