Dragones cinematográficos

Son las mayores criaturas voladoras, representan la fuerza y lo poderoso. A través de la historia, el hombre se ha sentido fascinado por el mundo de los Dragones, presentes en los mitos y leyendas de casi todas las culturas y sirviendo de inspiración al cine para increíbles historias.
En occidente son criaturas peligrosas que emanan fuego, y el género fantástico ha creado legiones, como la adaptación del videojuego Calabozos y Dragones, donde son valerosos miembros del ejército de la Emperatriz que luchan contra un maligno brujo. El Reino del Fuego es un mundo apocalíptico, y tenemos al dragón más gigantesco y temible, quien tras reposar en el subsuelo de Londres despierta junto a sus hordas asolando la tierra. De manera individual tenemos a Draco de Corazón de Dragón, el último dragón con aliento de fuego que dona la mitad de su corazón a un rey tirano de, y a Zaphira, la dragona y mejor amiga de Eragon, al cual está ligada mentalmente en el mundo mágico de Alagaësia.
En la primera entrega (Harry Potter y la Piedra Filosofal) del mundo mágico de Harry Potter vemos el nacimiento de Norbert, la cría de dragón del inocente gigante Hagrid, y en la cuarta (Harry Potter y el Cáliz de Fuego) el joven aprendiz tiene que superar al dragón más peligroso por el torneo de los 4 magos poniendo en riesgo su vida.
Tenemos poderosas brujas de la factoría Disney que se convierten en estas feroces y destructivas criaturas, como Maléfica de La Bella Durmiente, el hada malvada que se convierte en un terrible dragón para librar una impresionante batalla contra el príncipe con funestas consecuencias, y a Madam Mim de La Espada en la Piedra, quien en un duelo de magia con el Mago Merlín se transforma en un dragón, pero este se vuelve una poderosa bacteria, haciendo que enferme y pierda la contienda.
Para los asiáticos es un símbolo de suerte y poder, como Fújur, el dragón de la Suerte en La Historia Interminable (Die unendliche Geschichte), aunque en el cine lo vimos como un gran perro volador de peluche con orejas de cocker; de El Viaje de Chihiro (Sen to Chihiro no kamikakushi) tenemos a Haku, el espíritu de un río cuya forma natural es la de dragón pero al vivir en un mundo de fantasía se transforma en un niño en el increíble viaje de una niña a un fantástico mundo; y a Mushu, el excelente guardián que ayuda de una singular manera a Mulán a luchar contra los Hunos y a devolverle el honor a su familia.
Otros son Charizard, el dragón volador de Pokemón capaz de derretir cualquier cosa y que va evolucionando en busca de oponentes fuertes, y a El Dragón Blanco De Ojos Azules, invocado de una forma muy especial en el universo de duelos de Yu Gi Oh! (Yûgiô Duel Monsters: Hikari no pyramid)
Criaturas divertidas son Tobías de El Dragón Chiflado, divertido personaje de un corto de Disney, quien a diferencia de los feroces monstruos, prefiere jugar y cantar; el flamígero dragón que se enfrenta a Shrek y que resulta ser una solitaria dragona que se enamora de Burro, salva al dúo y forma una singular familia; o a John John, el pequeño dragón que busca su destino pasando por muchas aventuras en Dragones, Destino de Fuego, una de las recientes películas animadas nacionales.
Ahora es el turno del mítico mundo de los rudos vikingos y los dragones salvajes en Cómo entrenar a tu Dragón, con un joven guerrero que encuentra a un dragón que le hace ver el mundo de manera diferente. Quizá algun día nos sorprendamos viendo en el cielo una sombra muy grande para ser un ave, y es que el dragón es uno de los seres fantásticos que más pasiones despierta.