Magazine
Te voy a echar de menos.Incluso la manera en la que te reías de mí o la emoción que suponía ver tu coche blanco en la puerta de tu casa. Ya llegó el Chegu.
Voy a echar de menos que nos llames “frikis” o “titis” . Que aparezcas por la puerta del Láser y comas tortilla antes de saludar. Porque luego me llamas reina y se me olvida.Incluso voy a echar de menos ese grito de Sonia cuando aparecías: CHEGUREN!! Y tu cara de nostalgia cuando te contábamos que nos íbamos a estudiar a la universidad o que nos habían dado una beca Erasmus.
Te voy a echar de menos de verdad. Voy a echar de menos la cara de “tonto” que ponías mientras decías que eras daltónico. Y esos ojos azules de los que presumías a menudo. Y con razón.
Las tardes de verano se hacían más divertidas cuando tenías vacaciones. Nos reíamos tanto contigo que no nos importaba que te cogieras el bol del Láser para ti solo.
Ahora recuerdo todas las noches en la Chupi donde sin querer empezamos a conocernos, hasta que un día nos dimos cuenta de que éramos amigos y que de tantas noches de copas y tardes de cervezas había algo más. Había un cariño enorme del que no he sido consciente hasta ahora.Cuando alguien muere todo el mundo dice cosas bonitas sobre él. Pero en este caso, hubiera escrito lo mismo sobre Chegu la semana pasada.
Aguilar es un lugar más triste porque faltas tú. Te voy a echar de menos tanto que no quiero ni pensarlo.
También podría interesarte :