Tiene razón Hector en que probablemente no sirva de nada su terrible experiencia, no es preciso esperar dos semanas ya que ayer mismo otro salvaje cometería un acto semejante si la actuación de los presentes no fuese rápida y eficaz. Hoy es lunes y es mas que probable que las crónicas de sucesos nos vayan llegando con su desgraciado hábito. Ojalá sirva de ejemplo, pero la historia nos habla de que las autoridades toman medidas sobre prevención en cualquier actividad deportiva cuando ya es demasiado tarde. Es necesario que una portería mate a un niño para luego sujetarla correctamente. Héctor lo puede contar, lo único agradable de algo que pudo ser mucho peor. Héctor Giner, árbitro de 17 años, saltó a la primera plana después de que el pasado domingo fuera agredido mientras arbitraba un partido de categoría regional en Burjassot y fruto de ello perdiera el bazo. Tras permanecer seis días ingresado en el Hospital Arnau de Vilanova de Valencia, del que ya ha recibido el alta, ha elegido su cuenta en la red social 'Twitter' (@hectorginer95) para agradecer el apoyo recibido y desear que espera que su caso sirva de ejemplo."Quiero recordar a aquellos que me han mostrado su apoyo más 'incondicional' que a ver si laproxima vez que vayan a un campo de futbol se piensan dos veces lo que le van a decir o hacer a un árbitro", ha remarcado." ¿De qué sirve #totsamHector si dentro de dos semanas volvemos a las andadas", añadía.Además, bromeó con el buen trato recibido durante su estancia en el hospital: "Sin ellos desde luego no estaría como estoy. Os animo a todos a poneros enfermos y pasaros por Arnau de Vilanova".
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